LOCAL
Joan Ribó levanta muros de hormigón en el principal acceso por coche al Cabanyal
El Ayuntamiento corta el cruce de Serrería con Pedro de Valencia y desata las críticas de vecinos y vendedores del Mercado

Durante años, las vías de la línea férrea que une Valencia con Barcelona ejercieron de barrera (una más) entre el Cabanyal y el resto de la ciudad. El soterramiento del trazado ferroviario supuso un hito histórico para los habitantes del barrio marinero. Corría 1991 y, por fin, los vecinos ya no tenían que esperar al alzado de las barreras ni recurrir a la pasarela metálica levantada a la altura de la calle Vicente Gallart. Casi veinticinco años después, el equipo de Gobierno que preside Joan Ribó ha vuelto a levantar un muro (esta vez en forma de bloques de hormigón), entre el Cabanyal y Algirós.
Este fin de semana, sin previo aviso a los afectados , el Ayuntamiento ha cortado el paso entre la calle Pedro de Valencia y Martí Grajales en el cruce con Serrería. No se trata de una decisión cualquiera. Esta ha sido la vía natural de entrada y salida al barrio para miles de valencianos desde 1991.
Al parecer, el Consistorio esgrime la peligrosidad del cruce . Cierto es que en el año 2007 se registró un grave accidente de tráfico en este punto. Pero el cierre de la vía, que enlazaba el ambulatorio de Serrería con el Mercado del Cabanyal, supone un golpe de gracia para los vendedores del recinto comercial, cuyos dirigentes, a través de las redes sociales, ya han expresado su rechazo a la medida.

A partir de ahora, los vehículos que circulen desde Blasco Ibáñez deberán tomar la rotonda de la estación de Renfe y circular en dirección hacia la estrecha calle Juan Mercader para acceder al barrio. Otras opciones pasan por bajar hasta la avenida del Puerto o hasta Pintor Ferrandis.
Mientras, con el plan para la prolongación de Blasco Ibáñez derogado por el nuevo equipo de gobierno municipal, los vecinos siguen a la espera de que fructifique la petición de fondos anunciada por Joan Ribó para rehabilitar un barrio que, por perder, ya ha perdido hasta su principal vía de acceso.