Economía

El presidente de la Cámara de Comercio de Valladolid dimite «por falta de tiempo»

El también director general de Protos, Carlos Villar, podría ser sustituido por Víctor Caramanzana

El hasta ahora presidente de la Cámara vallisoletana, Carlos Villar F. HERAS

IVÁN TOMÉ

El presidente de la Cámara Oficial de de Comercio e Industria de Valladolid y director general de Protos, Carlos Villar, ha dimitido este martes como máximo representante de la institución por «no sacar el tiempo necesario para estar a la altura de mis responsabilidades y, día a día, mi rendimiento tanto en Protos como en la Cámara de Comercio se resiente», además de que su compromiso con la administración era para dos años, tiempo máximo previsto para convocar nuevas elecciones a la Cámara de Comercio, y alargarlo más «no tenía sentido y tenía que hacerse».

Villar ha admitido que su intención era esperar a que se convocasen las elecciones, pero «vista la situación política actual y, tras hablar con la Cámara de Comercio española, se podría alargar hasta un año más , y tanto no se puede esperar». «Protos se merece estar a la altura del momento que está viviendo y la Cámara, un buen presidente», ha apuntado Villar, quien accedió al cargo tras la dimisión en diciembre de 2013 de su anterior presidente, José Rolando Álvarez, tras más de siete años al frente.

Ahora se abre el proceso de sustitución para elegir al nuevo presidente en funciones, que se tendrá que elegir entre 48 horas y 15 días tras la salida del cargo de Villar. «Tiene que ser alguien del Pleno, que ahora es el miembro soberano, para que sea votado por los demás. La idea es que la elección se lleve a cabo este jueves por la tarde para que no haya un vacío de poder y se pueda trabajar cuanto antes en favor de la Cámara», ha declarado Villar.

Hasta el momento, según ha mencionado el director general de Protos, sólo hay un nombre encima de la mesa. Se trata del presidente de la Asociación de Empresarios de Medina de Rioseco y Comarca y Vicepresidente del Comité Ejecutivo de la institución, Víctor Caramanzana , un empresario que, en palabras de Carlos Villar, «es una persona ideal, que encarna los valores necesarios, aunque cualquier plenario podría hacerlo muy bien, ya que, tanto nosotros como el Comité Ejecutivo, estamos aquí de manera altruista».

Balance positivo

Antes de abandonar el cargo, Carlos Villar quiso hacer una pequeña valoración de estos dos años y dos meses al frente de la Cámara de Comercio de Valladolid. Villar aseguró que el balance «ha sido positivo» sobre todo por el cambio del modelo de financiación de la Cámara, como el de mentalidad. También recalcó la «potenciación» de dos áreas importantes como la formación y el comercio exterior, bases de los ingresos presupuestarios, y la consolidación de la Escuela de Cocina de Valladolid.

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