Hallan muerto en Toledo a un hombre dentro de un coche y con una bolsa en la cabeza
En el interior del vehículo, estacionado en la vía de servicio de la avenida de Europa, había una bombona con dióxido de carbono conectada a un tubo de plástico
Un hombre de 47 años ha sido hallado muerto en Toledo dentro de un vehículo este mediodía. El fallecido tenía una bolsa de plástico tapando su cabeza y una bombona con gas conectada a un tubo de plástico, según confirmó a abc.es la Policía Nacional. Se trataba de dióxido de carbono, apuntaron otras fuentes.
El turismo estaba estacionado en la avenida de Europa , una zona de la ciudad muy transitada. El vehículo se encontraba en el aparcamiento de una vía de servicio, a la altura de la delegación provincial de Educación y enfrente del parque de las Tres Culturas. La Policía investiga si se trata de un suicidio.
Unos estudiantes del Instituto de Enseñanza Secundaria «Universidad Laboral» , localizado a pocos metros del lugar de los hechos, dieron la voz de alarma sobre las doce y media. El hombre, que trabajaba como celador en un hospital y en la hostelería, fue encontrado con una bolsa de plástico en la cabeza y podría haber empleado el gas carbónico que contenía la bombona para acelerar el trágico desenlace por la falta de oxígeno.
Este gas, que es insípido, incoloro, inodoro y no inflamable, no es tóxico ni venenoso. «Es comestible», apunta un distribuidor de cerveza consultado por abc.es. De hecho, se emplea en hostelería para generar efervescencia en bebidas como la cerveza, la gaseosa o el champán. En estado sólido, al dióxido de carbono se le conoce como «hielo seco»; se usa como refrigerante y puede ser abrasivo en descargas a presión.
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