Detenido un pirómano de 22 años que se quedó embelesado con el fuego

Su afición patológica por el fuego le ha costado la detención a un joven pirómano de 22 años que, tras prender fuego a dos contenedores en el barrio zaragozano de Garrapinillos, en vez de salir huyendo —como suele ser habitual en estos casos— se quedó presenciando las llamas. Tan embelesado permaneció que dio tiempo a que acudieran hasta el lugar agentes de la Guardia Civil.

Fue entonces cuando el joven se dispuso a marcharse, pero ya era tarde. Los agentes le identificaron y le arrestaron. Ocurrió ayer por la tarde, según ha informado este miércoles la Guardia Civil.

El joven es de nacionalidad búlgara, aunque lleva tiempo residiendo en Garrapinillos. Se le imputan varios delitos de daños. Y es que, además del incendio que le ha costado la detención, él mismo confesó poco después a los agentes que días atrás ya había cometido actos similares.

Además de los contenedores a los que prendió fuego el martes por la tarde, las llamas también llegaron a afectar a una vivienda próxima, según han indicado las mismas fuentes.