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Maletines, relojes de lujo, obras de arte valoradas en 15 millones de euros y otras perlas del caso Púnica
Los suegros de Granados guardaban en un maletín, cerrado con dos candados y «oculto» por varios libros en un altillo, cerca de un millón de euros
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«Ya veremos quién estará a tu lado cuando caigas»
La relación entre Marjaliza y Granados a veces no atravesó siempre un buen momento, hasta el punto de que el empresario le dijo al político: «Ya veremos quién estará a tu lado cuando caigas en el cargo». Así consta en los correo elecrónicos volcados en el ordenador de Granados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil el 17 de julio de 2015. La UCO informa de la compra de tres chalés de lujo en Marbella en 2003, de los que habrían disfrutado durante siete años Granados y su sucesor en la Alcaldía, José Miguel Moreno, por un precio irrisorio. Marjaliza le dijo al juez que él perdía dinero con esa operación, pero lo hacía «para agasajarles de alguna manera».
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Un maletín, dos candados, y 1.630 billetes de 500 euros
Los suegros del ex secretario general del PP de Madrid y antiguo alcalde de Valdemoro, Francisco Granados, guardaban en un maletín, cerrado con dos candados y «oculto» por varios libros en un altillo, cerca de un millón de euros, divididos entre 1.630 billetes de quinientos y otros centenares de doscientos y cien euros. A raíz de este registro, que se realizó en diciembre de 2015 y que adelantó ABC, Juan Alarcón y Catalina Castellanos, están imputados por blanqueo y colaboración en la ocultación del dinero. En su declaración ante el juez, dijeron que no habían visto «en su vida» ese maletín y que no sabían quién lo había colocado ahí porque pasa mucha gente por esa casa.
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Obras de arte valoradas en 15 millones de euros
La investigación de la Púnica detectó en un almacén de Suiza numerosas obras de arte entre ellas de Chillida, Barceló y Tapies, adquiridas por empresas vinculadas a David Marjaliza en el marco de una compleja trama de blanqueo. Se trata de 28 pinturas, 5 fotografías, 4 esculturas y 185 plumas. «El importe estimado de las obras de arte y demás objetos de lujo que pueden encontrarse en el almacén suizo rondaría los 15.688.000 euros», señala e l juez Eloy Velasco en un escrito de marzo de 2015 en el que pedía colaboración a las autoridades helvéticas para su decomiso. El juez asegura que Marjaliza «minoró el valor de las obras en más del 70 por ciento de su valor real».
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Una veintena de cuentas bancarias en Suiza
El ex secretario general del PP en Madrid Francisco Granados y su socio David Marjaliza, y sus mujeres también como titulares, contaban con 19 cuentas bancarias millonarias en Suiza, algunas a nombre de sociedades controladas por ellos. En concreto, Granados y su esposa, Nieves Alarcón, abrieron una cuenta en la entidad BNP Paribas de Suiza con fondos procedentes de otro banco en la que en solo seis años (de 2000 a 2006) hicieron ingresos por importe de 1,5 millones de euros. Presumiblemente la cuenta fue cancelada en 2007, pero transfirieron los fondos, por importe de 1,7 millones de euros, a otra cuenta abierta en Suiza, esta vez a nombre de una sociedad.
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Plumas y relojes de lujo, incluso para regalar
La colección de objetos que la Guardia Civil ha requisado en la operación Púnica incluye numerosos productos de lujo, que van desde las plumas de serie limitada Montblanc, que el empresario David Marjaliza coleccionaba y regalaba, a cuadros y relojes comprados en ocasiones en paraísos fiscales. En el dormitorio que el cuñado de Francisco Granados, Germán Alarcón, tiene en casa de sus padres, la Guardia Civil encontró cuatro plumas de esa marca, un reloj de Tiffany, otro reloj de pulsera Mont Blanc y la garantía de otro de marca Eberhard. Este último fue comprado en un paraíso fiscal, la isla de Aruba. En otro edificio, los agentes encontraron un cuadro.
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La «distracción» de fondos en Valdemoro
El Ayuntamiento de Valdemoro (Madrid) destinó el 2% de un contrato de 60,8 millones de euros adjudicado en diciembre de 2013 a la empresa Cofely, filial de la multinacional francesa GDF Suez , a la confección de un estudio de consultoría que encomendó a una de las sociedades de David Marjaliza. Para el juez, se trata de una «indiciaria distracción de caudales públicos» a través de la articulación de un «flujo de fondos» desde el consistorio a Ruta Energética S.L., «sociedad instrumental de la trama societaria de Marjaliza». Estas «prácticas irregulares» en materia de contratación se desarrollaron desde junio de 2011 cuando Boza Lechuga llegó a la Alcaldía y durante las etapas anteriores.
