John Kerry aterriza en Madrid y comienza su visita oficial de dos días
Margallo se reunirá con el secretario de Estado norteamericano para abordar cómo frenar el conflicto palestino-israelí

El secretario de Estado norteamericano, John Kerry , ya está en Madrid. Tras varios aplazamientos de su visita, aterrizó en el aeropuerto de Torrejón de Ardoz pasadas las seis de la tarde, desde donde se dirigirá al lugar de la reunión que tiene previsto mantener con el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.
Ambos analizarán cómo rebajar la tensión en el actual enfrentamiento entre palestinos e israelíes , que ya se conoce como la «intifada de los cuchillos» , en una cena en la que la situación en Oriente Próximo, en sus distintos frentes, será el tema central. Entre otras razones porque para el jueves, día 22 de octubre, está convocada una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que será presidida por el ministro español.
La reunión del Consejo sobre Oriente Próximo estaba prevista ya desde hace tiempo, pero cobra un especial interés tras multiplicarse en las últimas semanas los ataques de palestinos a soldados israelíes y la consiguiente respuesta del Gobierno de Israel, lo que está provocando varios muertos cada día. Tras pasar por Madrid, el jefe de la diplomacia estadounidense tiene, al parecer, intención de encontrarse en Berlín con el primer ministro israelí , Benjamin Netanyahu, y reunirse con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, en un lugar todavía no determinado.
Kerry y García-Margallo tienen previsto comparecer este lunes conjuntamente ante la prensa y, previsiblemente, firmar una declaración política por la que Estados Unidos se compromete a retirar los 50.000 metros cúbicos de tierra contaminada de Palomares , en un accidente que el próximo mes de enero cumplirá 50 años.
El 17 de enero de 1966 la Fuerza Aérea de los EE.UU. perdió un avión cisterna, un bombardero estratégico y las armas nucleares que transportaba este último. La recuperación y limpieza de las armas caídas le costaron al ejército estadounidense 80 millones de dólares de la época, retirando en 4.818 bidones 1.400 toneladas de tierra y tomateras. Manuel Fraga Iribarne, entonces ministro de información y turismo, se bañó en la costa de Palomares ante las cámaras para demostrar que la zona no era peligrosa para el turismo.
Noticias relacionadas