Podemos paraliza las propuestas de sus bases mientras estudia un cambio en el censo

La militancia pidió actualizar el número de inscritos para que prosperen sus iniciativas, pero ahora teme que la respuesta del partido sirva para bloquearlas hasta después de las generales

Podemos paraliza las propuestas de sus bases mientras estudia un cambio en el censo abc

m. ruiz castro

Cuando un grupo de críticos de Podemos lanzaba la semana pasada un manifiesto, con el «barón» de Aragón Pablo Echenique a la cabeza, pidiendo más apertura en el partido — «Abriendo Podemos», llamaron a la iniciativa —, el toque de atención no era solo para pedir un partido más participativo. En la base estaba un problema de bloqueo de la democracia interna de la que Podemos ha hecho gala desde sus inicios.

«Abriendo Podemos» puso el foco del citado manifiesto en la llamada a la confluencia —«la apertura que reclamamos hoy, ante la perspectiva de las próximas elecciones generales, debe tener consecuencias también en el modo en que Podemos se presentará a las mismas»—, pero decidir cómo se concurre a las generales no es más que la punta del iceberg de la discordia en Podemos . El problema de origen es precisamente ese inmovilismo de la cúpula del partido del que se quejan parte de las bases, ya sea a cuenta de la forma en la que ir a las urnas o de las propuestas que el partido hace «desde abajo».

Cuando se confeccionó la hoja de ruta en la Asamblea Constituyente de Vistalegre, se acordó dotar a Podemos de un mecanismo para que las bases pudieran hacer propuestas que, de alcanzar el número de apoyos suficientes entre la militancia, deberían ser sometidas a votación vinculante por la Asamblea Ciudadana, máximo órgano de decisión del partido. El mecanismo es sencillo : en el foro «Plaza Podemos» se plantea la propuesta, que tiene que recabar un 2% de apoyos para que el partido la cuelgue en su página de participación, le de visibilidad y abra el plazo de tres meses para que el 10% de los inscritos la vote positivamente. Una vez superado ese filtro, un grupo de trabajo en el que se incluye a quienes la propusieron tiene un mes para elaborar el documento final —si no hay acuerdo, se presentan las dos versiones: la inicial y la del grupo de trabajo— y el partido está obligado a tenerla en consideración y someterla a consulta vinculante.

Abriendo Podemos pedía también más «pluralidad interna» y no limitarse únicamente a representar, sino también «canalizar iniciativas y voluntades». Había un fuerte malestar en las bases del partido, que se quejan de que las iniciativas que se presentan tienen que pasar el filtro previo del 10% de apoyos —hay varias sobre cómo concurrir a las generales que ni siquiera han pasado la primera criba del 2%—, pero el censo no se actualiza y son muchos más los inscritos que los verdaderos militantes activos , apuntan a ABC fuentes de la militancia.

La renta básica, parte del problema

Una de las medidas que están siendo sometidas a votación en el portal de participación de Podemos es del Círculo Renta Básica de Podemos, el sector que propuso hace dos semanas un modelo de renta básica universal con un tipo único del IRFP del 46% y que contó con el apoyo de Juan Carlos Monedero durante su presentación. El círculo quiere que Podemos debata su propuesta antes de las elecciones generales , con el objetivo de que la medida se incluya en el programa del partido para esos comicios.

Desde el colectivo, se pusieron en contacto con la Comisión de Garantías Democráticas de Podemos y le reclamaron que actuara de oficio para crear «unas condiciones eficaces y justas de democracia participativa». Se quejaban de que el porcentaje del 10% de inscritos en el partido «está calculado en base a un censo no actualizado y, por tanto, irreal, formado por una mayoría de cuentas inactivas», y de que las consultas que habían realizado al Equipo Participación «no habían obtenido respuesta». «No es posible una democracia directa y participativa eficaz dentro de Podemos» , señalaban, junto a un alegato final: «Construyamos PODEMOS decidiendo en común».

Un día después, el partido paralizó la votación de las iniciativas. «Las ICP (Iniciativas Ciudadanas de Podemos) están en pausa ya que es se está estudiando un posible cambio en el tipo de censo de Podemos que las regirá . Serán reanudadas una vez se tome una decisión al respecto».

Aunque en un primer momento la decisión de partido se recibió con esperanza y alegría —agradecemos la pronta respuesta y la voluntad de querer resolver cuanto antes los obstáculos a la democracia participativa», decían desde el Círculo Renta Básica—, miembros de la militancia desconfían de que, con el pretexto de estar «estudiando» cómo mejorar el censo, las iniciativas permanezcan paralizadas hasta después de las generales .

De hecho, fuentes de las bases están convencidas de que en Podemos no quieren ni oir hablar de la Renta Básica Universal , una de las iniciativas a estudio que además fue medida estrella del partido para las elecciones europeas, y podrían querer bloquearla para que la Asamblea Ciudadana no exija incluirla en el programa de las generales.

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