Ciudadanos prioriza el pacto con el PP y rompe con el PSOE en Almería

La noche electoral dejó una rápida conclusión sobre el papel que iba a jugar Ciudadanos a la hora de abordar la gobernabilidad del país. Era especialmente el Partido Popular quien iba a depender de los de Albert Rivera. Con el portazo del PSOE y la distancia ideológica con el resto de fuerzas políticas, el PP se ha visto en la tesitura de encontrar en el partido emergente el único interlocutor clara de pacto.

Todo parece indicar que el PP retendrá las cuatro autonomías que dependían de Ciudadanos ( Comunidad de Madrid, La Rioja, Murcia y Castilla y León ) después de que en todas ellas hayan terminado por firmar el pacto por la regeneración que exige C's, dejándose varios imputados en el camino.

También dependía el PP de Ciudadanos en 18 capitales de provincia. Con solo una mayoría absoluta, en Ceuta, y pese a ser la fuerza más votada en 37 capitales el PP solo aspiraba a gobernar en aquellas en las que dependía de C's. Aunque finalmente el desencuentro entre Podemos y el PSOE les dará la alcaldía en Oviedo. En lo que respecta a los acuerdos con el partido naranja, y a falta de las últimas novedades, el PP podrá retender una quincena de esas capitales gracias al consentimiento de los de Rivera .

Pero en estos tiempos de pacto, los de Rivera han querido distanciarse del latiguillo de «muleta del PP» con varios guiños al PSOE. Proyectar una imagen de centralidad es fundamental para el partido. El más evidente ha sido el alcanzado para que Susana Díaz, aunque el matrimonio con los socialistas ha quedado en entredicho después de que a última hora el PP decidiera romper su pacto en Almerúa y dejar que gobiernen los populares.

En la Comunidad Valenciana Ciudadanos lanzó el guante al PSOE para sumar sus fuerza y, con la abstención del PP lograr la alcaldía de la capital y el gobierno regional. Pero la negativa de los populares de apoyar cualquier fórmula que involucrase a los socialistas y la preferencia del PSOE valencianos por acercarse a Podemos y Compromís para forjar un tripartito dio al traste con este intento de acercamiento.

Actor principal en la política de pactos , Ciudadanos no gobernará ningún municipio relevante. Su lugar estará en la oposición. Desde donde fiscalizará el cumplimiento de los acuerdos que ha alcanzado con los partidos a los que ha dado su bendición para gobernar. El gobierno de cinco autonomías y una veintena de capitales de provincia depende de ello. En una legislatura que amenaza a inestabilidad, cada voto cuenta para sostener o hacer caer un gobierno.