Una mujer tendrá que seguir alimentando a su hija de 27 años al no conseguir empleo estable
Debe pasarle 250 euros al mes pese a que, según ella, la joven no se esforzaba por conseguir un puesto de trabajo
Una mujer tendrá que seguir alimentando a una hija porque, a pesar de que tiene 27 años de edad, ha demostrado que no consigue encontrar un trabajo estable que le permita independizarse y porque rinde en los estudios que realiza para aumentar su formación.
Así lo dispone una sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Murcia que desestima el recurso que la madre presentó contra la resolución del Juzgado de Familia que rechazó su solicitud de modificar el régimen de medidas fijadas en 2011 con ocasión de la separación matrimonial. Ese régimen, que continuará vigente, estableció que la hija quedaría en la vivienda familiar junto con el padre y que la madre debía abonarle una pensión por alimentos de 250 euros al mes .
En su apelación, esta última alegó que su hija «iba encadenando titulaciones heterogéneas» y que no se esforzaba por conseguir un puesto de trabajo , por lo que se debía anular la obligación de pasarle la pensión por alimentos.
Ahora, la Audiencia Provincial de Murcia no ha estimado el recurso al acreditarse que la joven sí trata de encontrar trabajo, aunque no lo consigue, ya que solo ha obtenido un contrato como auxiliar administrativo a tiempo parcial por el que percibe 250 euros mensuales. Así mismo, hace constar que se ha demostrado igualmente que progresa de forma adecuada en sus estudios, por lo que tampoco por esta vía se encuentra argumentación alguna para anular la pensión por alimentos. Al rechazar la apelación, la sala condena a la madre al pago de las costas generadas con su recurso.
