Historia
El remoto origen del DNI: las cédulas de composición de hace cinco siglos
El enorme tráfico de gente en dirección al Nuevo Mundo, tras el Descubrimiento de América, obligó a la Monarquía hispánica a establecer un precario documento de identificación
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El DNI (Documento Nacional de identidad) nació como tal durante el Franquismo, concretamente por decreto presidencial del 2 de marzo de 1944, con la finalidad de identificar a los ciudadanos y mantener un control más eficaz sobre el censo. Sin embargo, la tradición de documentos de identidad en España se remonta a uno de los momentos de mayor emigración en la historia de la Península Ibérica: la colonización de América .
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A las numerosas epidemias que azotaron Europa a finales del siglo XVI –posiblemente a causa de razones climáticas, como sostiene Geoffrey Parker en su libro « El siglo maldito »– y a la inagotable demanda del Imperio español de más y más soldados, que causaron una grave crisis demográfica en Castilla , hubo que añadir el goteo migratorio con dirección al Nuevo Mundo. Solo entre 1598 y 1621, cerca de 40.000 personas abandonaron el reino ibérico en busca de oportunidades de prosperar en América. En tiempos de un incipiente comercio ultramarino, la Monarquía hispánica se vio en la necesidad de establecer un control de las identidades de sus comerciantes y ciudadanos.
El control sobre quiénes cruzaban el Atlántico, ponía énfasis en que fueran cristianos
La cédula de composición era un documento, formado por un pergamino con los datos básicos escritos a mano, que identificaba a los nautas procedentes de Europa . El objetivo prioritario era controlar quiénes cruzaban el Atlántico, poniendo especial énfasis en que fueran cristianos y estuvieran autorizados por la corona para ello. Por razones evidentes, este precario intento de establecer un sistema de identificación era fácil de falsificar y no se puede considerar estrictamente un antecedente del DNI, sino una iniciativa aislada que no tuvo continuidad .
Hubo que esperar hasta el reinado de Fernando VII , en cuyo periodo también se estableció el antecedente de la Policía Nacional , para encontrar un documento parecido a lo que hoy entendemos como DNI. Bajo orden real y para reducir la criminalidad en un país asolado por el bandolerismo, se comenzaron a utilizar cédulas personales y cartas de seguridad , antecedentes directos del DNI. Eran documentos donde se incluía nombre y ascendientes directos, al principio iban sin fotografía y carecían de las medidas de seguridad más esenciales. Las cédulas eran expedidas por ayuntamientos y diputaciones para todos aquellos que hicieran gestiones con organismos oficiales.
Franco, el DNI número 1º
Con el final de la Guerra Civil y la llegada de Francisco Franco al poder , se planteó la creación de un nuevo documento dotado de ciertas medidas de seguridad y que, además de contener los datos básicos para la identificación de los ciudadanos, incluyera las impresiones dactilares. La puesta en marcha del DNI se aprobó a través de un decreto el 2 de marzo de 1944 . Para el diseño del primer DNI se convocó un concurso público, que fue ganado por Aquilino Riusset Planchón , recibiendo un premio de 30. 000 pesetas de la época. Según las bases del concurso, la tarjeta debía adaptarse a la cartera de bolsillo, tener espacio para que, además del texto, figurara una impresión dactilar y una fotografía del titular y las tintas debían ser inalterables a la luz.
No en vano, el general Franco tuvo que esperar hasta 1951 para estrenar su propio carné de identidad, puesto que el decreto tardó en ponerse en marcha de forma masiva. El dictador recibió el número 1, a su esposa, Carmen Polo , se le asignó el 2; y a su hija, Carmen Franco el 3. A su vez, en el año 1961 se dispuso para el Rey Juan Carlos y su esposa Doña Sofía los números 10 y 11 respectivamente. La Familia Real se reservó los números que van del 10 al 99. En 1980, a la Infanta Elena se le asignó el número 12, mientras a la Infanta Cristina se le otorgó el 14, dejando al número 13 sepultado por superstición. El número 15 fue establecido para el entonces Príncipe Felipe.