Margallo anima la cumbre: «Esto no es Pentecostés»

El Gobierno de España y el de México, el anfitrión, han intentado por todos los medios que la ausencia de Raúl Castro no marcara este Cumbre Iberoamericana. Se esperaba al dictador cubano, quien finalmente ha decidido no acudir y quedarse en La Habana junto a otros mandatarios que participan en el foro de países del Caribe. Lo cierto es que se ha puesto de manifiesto la existencia de dos bloques iberoamericanos : los bolivarianos, y el resto.

El ministro de Exteriores español, José Manuel García Margallo, ha defendido la buena salud de las cumbres iberoamericanas, y ha quitado toda importancia al hecho de que haya bloques. Porque haberlos, haylos. «Claro que los hay», ha exclamado Margallo cuando se le ha preguntado por este asunto en un corrillo con periodistas. «Los bloques van a seguir existiendo. No se puede esperar que las cumbres sean como Pentecostés y que se aparezca el Espíritu Santo, ni yo me voy a hacer bolivariano ni Maduro se va a hacer demócratacristiano, cada uno con lo suyo».

La declaración de Margallo ha sido la más celebrada de la cumbre. El ministro de Exteriores ha defendido la importancia de estas cumbres para España. «Son un gran capital para nuestro país», ha destacado, y ha comentado que muchos países de nuestro entorno sentirían envidia de contar con un foro semejante con países que comparten lengua, cultura, historia, tradiciones...