ELECCIONES GENERALES
Sánchez, Rivera e Iglesias, abiertos a pactos a tres para expulsar al PP de La Moncloa
Cada uno de ellos baraja acuerdos con los otros dos para evitar que Rajoy repita
Su apoyo o abstención en la investidura puede ser suficiente si se suman otros grupos
![Pedro Sánchez en un mitin del PSOE](https://s2.abcstatics.com/media/elecciones/2015/12/05/sanchez--620x349.jpg)
A las elecciones del próximo 20 de diciembre concurren cuatro candidatos con aspiraciones -más o menos verosímiles- de ser presidente del Gobierno. A la luz de la mayoría de las encuestas y sobre todo de la última del CIS, es Mariano Rajoy, líder del PP, quien parte con ventaja. Sin embargo, ¿hasta dónde están dispuestos a llegar Pedro Sánchez, Albert Rivera y Pablo Iglesias para evitar la investidura de Rajoy o para propiciar la suya propia?
De momento el único que se compromete a respetar a que gobierne la fuerza más votada es precisamente Rajoy, pues ha repetido una y otra vez que lo contrario sería vulnerar la voluntad de la mayoría. Los otros tres candidatos se niegan a adquirir este compromiso. Aunque Sánchez pidió ayer un voto más que Rajoy, juega en la ambigüedad y tampoco rechaza públicamente intentar formar gobierno siendo segundo . Así, los tres partidos diseñan sus estrategias atendiendo básicamente a dos criterios: el puesto que ocupen el 20-D y la distancia existente en escaños en relación con el primero (si es que no son ellos).
En el PSOE, preocupados ante la deriva a la baja que ofrecen los sondeos tas y ante el crecimiento de Ciudadanos (en algunas encuestas ya está por delante), apelan al voto útil para tratar de remontar y conseguir imponerse al PP . En el caso de ser el candidato más votado, el vencedor de las elecciones, Pedro Sánchez está abierto a buscar un acuerdo a tres con el partido de Albert Rivera y con el de Pablo Iglesias. Y no sólo un pacto de investidura, sino que está dispuesto a abrir una ronda de contactos para ofrecer un «programa común» de gobierno. La estrategia de Pedro Sánchez de pedir un voto más que Rajoy no responde, pues, a un compromiso por respetar la lista más votada, sino a la necesidad que tiene de aglutinar todo el voto que se le está yendo por ambos lados: por su izquierda, Podemos; por su derecha, Ciudadanos.
En contraposición a Rajoy, Albert Rivera ha planteado en numerosas ocasiones que el próximo presidente del Gobierno será aquel que sepa «seducir» a la oposición . No considera que deba gobernar la fuerza más votada, sino aquel capaz de articular la mayoría parlamentaria más amplia. En cualquier caso, sí otorgan a la primera fuerza la «legitimidad» de intentar formar Gobierno en primera instancia. Tras los resultados del ultimo CIS, en el entorno de Rivera se reconocía que si logran superar al PSOE y son segundos intentarán forjar esa mayoría, lo cual incluye la posibilidad de un apoyo de Podemos (ya fuera a través de un sí o de una abstención en la investidura). El partido de Rivera reconoce que un condicionante será la distancia con el primer puesto . Del mismo modo que si finalmente fuesen terceros admiten que sería muy inverosímil tratar de liderar una alternativa.
En el caso de Podemos, el objetivo es muy claro: sacar al PP del Gobierno. Es la lista liderada por Rajoy la única que no apoyarán y no cierran la puerta a permitir que un candidato alternativo sea investido presidente (ya sea a través del sí o de la abstención) . A partir de ahí, están dispuestos a hablar con todos, aunque aseguran que sólo entrarían en un Gobierno con el PSOE si Podemos obtiene más escaños, lo cual a día de hoy parece difícil. De hecho, en las autonomías su modelo ha sido facilitar el gobierno socialistas firmando acuerdos de mínimos programáticos.
A todo esto hay que añadir el papel que jugarán el resto de fuerzas , pues los apoyos o las abstenciones en la investidura pueden contribuir a nombrar un gobierno alternativo a la lista más votada.