Pedro Sánchez compareció este lunes en la sede socialista de Ferraz para lanzar la idea de que el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, es la persona ideal para presidir la Generalitat de Cataluña en medio de la parálisis política que augura el resultado electoral del 27-S.

«No se me ocurre mejor candidato», señaló el líder de los socialistas, tras asegurar que el PSOE, no Ciudadanos, es el único partido capaz de «restañar las heridas» de la división de la sociedad catalana entre partidarios y contrarios de la independencia.

Sánchez hacia estas valoraciones después de una primera reunión de la Permanente de la Ejecutiva Federal socialista que ha constatado la difícil situación en que quedan los ganadores de Junts pel Si; en particular su candidato, Artur Mas, porque el socio necesario en la aventura independentista, las CUP, ya ha dicho que no apoyará la investidura.

Los socialistas han hecho cálculos y llegado a la conclusión de que, pese a que Ciudadanos es la primera fuerza del constitucionalismo, por eso ha lanzado la candidatura de Inés Arrimadas como alternativa a Artur Mas, ella nunca sumará apoyos para ser la próxima presidenta de la Generalitat. Solo tiene seguros los diputados de la formación de Albert Rivera (25) y los once del PP.

Iceta, para la unidad

En cambio, y paradójicamente, en este magma político en que ha devenido el panorama político en esa comunidad, Iceta podría lograr votos tanto de partidos independentistas (CDC) como de PP Y Ciudadanos.

Una oferta «envenenada» dirigida a los diputados de la CDC, ahora incluidos en Junts pel Si junto con ERC y las plataformas de la ANC y Omnion Cultural, que ven con pavor la posibilidad de que el gobierno autonómico quede en manos de una fuerza anti sistema como las CUP.

A mostrar esas contradicciones de Junts pel Sí, se dedicó este mediodía Pedro Sánchez cuando señaló que sería una «enorme irresponsabilidad echarse en brazos de las CUP».

No a nuevas elecciones

Con alivio porque el resultado de ayer creer que deja meridianamente claro que no habrá sorpasso de Podemos y que «el único partido que puede derrotar a Rajoy» es el PSOE, Sánchez admitió que Cataluña ha quedado rota en «dos bloques homogéneos», a favor y en contra de la independencia, y que lo que se necesita es «reforma, dialogo convivencia».

Los catalanes, insistió en su mensaje de la noche el domingo, «han dijo un sí rotundo al reformismo y un no rotundo al rupturismo (de Mas) y al inmovilismo (de Rajoy)». Por eso, Junts pel Sí debe «abandonar» el «independentismo» derrotado en las urnas y abrirse a un gobierno reformista y federalista como el que propone Iceta.

Lo que no quiere el PSOE bajo ningún concepto son nuevas elecciones en un escenario de imposibilidad de formar gobierno al que hoy parar abocada Cataluña. «Si algo están pidiendo los catalanes ahora mismo es gobernabilidad y estabilidad política».