La Policía detiene a tres sospechosos de la ejecución del gerente del Oh! Palace

La Policía Nacional ha cerrado entre este martes y miércoles tres detenciones por el asesinato del gerente del Oh! Palace y de otros clubes de alterne de Andalucía. Son tres hombres, dos de ellos vecinos de El Puerto y un tercero de Sevilla. Les une con la víctima, Ángel Rodríguez, su vinculación al negocio de la prostitución.

Según fuentes cercanas al caso, los dos primeros arrestos los realizaron este martes agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría portuense. Se trata de un antiguo encargado del prostíbulo que gestionaba Ángel en El Puerto y un constructor que también había sido socio del fallecido.

La tercera detención se confirmaba este miércoles. Un vecino de Sevilla era apresado también como sospechoso de la violenta muerte del empresario, cuyo cuerpo fue encontrado parcialmente quemado en el maletero de su coche, un Volkswagen Golf, que fue incendiado en la zona de las Dos Palmeras el pasado jueves.

Los vecinos fueron los que alertaron a los servicios de emergencia de que un turismo estaba ardiendo en la vía pública. Cuando los bomberos sofocaron el fuego, hallaron el cadáver de Ángel. La autopsia confirmaría que había sido ejecutado de un disparo en la cabeza.

Los negocios de Ángel Rodríguez se extendían más allá de la provincia de Cádiz. No sólo fue gerente del Oh! Palace (hoy cerrado). También dirigía el Platinium (Los Barrios) y otros conocidos locales como los Daneses de Sevilla.

Amenazado y con problemas judiciales

Este periódico pudo conocer por personas allegadas al fallecido, que Ángel había recibido amenazas antes de ser asesinado y sufrió el incendio intencionado de varias propiedades.

Además, en 2013 fue arrestado en el marco de la 'operación Adán' por la Unidad de Redes de Inmigración (UCRIF) de la Comisaría de Algeciras. Los investigadores lo sitúan a la cabeza de un 'holding' empresarial que lavaba presuntamente grandes cantidades de dinero procedente de la prostitución.

Fuentes judiciales confirmaron a LA VOZ que el asunto sigue instruyéndose en un juzgado de Sevilla. En el marco de esas diligencias fue sonada una declaración realizada por Ángel en la que acusaba a policías y jueces de ser clientes habituales de sus locales. Unas manifestaciones ante la jueza de las que se tuvo que retractar.

Hace más de un año, tras verse envuelto en la operación policial que supuso la clausura temporal de sus negocios, a este empresario de los clubes de alterne le llegaron otros problemas de economía doméstica. Había acumulado una deuda importante por impago del alquiler de la finca donde se ubica el prostíbulo. Los dueños del inmueble lo demandaron y ganaron el juicio.

La reapertura del negocio a manos de sus antiguos empleados lo enfrentó con ellos. Si bien, meses antes de su muerte, Ángel había expresado a sus allegados que esas diferencias habían sido limadas.

Los detenidos se encuentran detenidos en los calabozos de la Comisaría de El Puerto.