Linde alerta de que la escasa formación de los parados dificulta su recolocación
El Banco de España urge el retorno a la educación formal de los desemplados jóvenes con un nivel formativo reducido y la mejora de los servicios públicos de empleo para evitar la exclusión laboral de este colectivo
El Banco de España corrobora en su último informe anual que el ritmo de creación de empleo en nuestro país se está acelerando y la reforma laboral, en conjunción con la recuperación económica, empieza a dar sus frutos. En todo caso, el supervisor nacional hace a lo largo de su análisis una serie de advertencias ante la difícil reincorporación de una parte de la población al mercado de trabajo y los riesgos de que la salida de la crisis se produzca con una elevada tasa de paro estructural . En este sentido, el organismo dirigido por Luis María Linde explica que la cualificación de los trabajadores en desempleo en España es, en general, reducida y asociada a sectores como la construcción. Esto, concluye, puede dificultad su recolocación profesional.
«Puede resultar un obstáculo al proceso de reasignación de factores en la medida en que las necesidades de la demanda de trabajo no puedan ser satisfechas por la mano de obra existente», detalla el banco central nacional, que señala que la crisis ha provocado una concentración de la destrucción de empleo en los colectivos con menor nivel de cualificación.
«La reabsorción del desempleo depende crucialmente del capital humano de las personas demandantes de empleo», dice el Banco de España, que observa sin embargo un elevado desajuste educativo entre oferta y demanda. Es decir, la cualificación que requieren las empresas no casa con la de los parados. «Este desajuste», continúa el informe, «podría dificultar la empleabilidad de los grupos menos cualificados, dado que las probabilidades de salida del desempleo son crecientes con el nivel educativo» . Así, el Banco de España llega a advertir de un cierto riesgo de exclusión laboral. «Los trabajadores menos cualificados presentan una mayor probabilidad de abandonar la búsqueda de empleo y pasar a una situación de inactividad, lo que intensifica los riesgos de exclusión laboral de este colectivo».
En este sentido, el Banco de España urge a adoptar las medidas necesarias para mejorar la empleabilidades de estos parados, incentivando el retorno de los parados más jóvenes y menos cualificados a la educación formal y modernizando los servicios públicos de empleo , de forma que definan las actividades formativas que mejor encajen para cada desempleado.