APERTURAS MEMORABLES
Así fueron las últimas ceremonias de inauguración
Desde el entusiasmo contagioso de Barcelona 92 hasta la Reina Isabel II lanzándose en paracaídas con James Bond en Londres 2012

Las ceremonias de inauguración de los Juegos Olímpicos son la carta de presentación del país que acoge el mayor de los eventos deportivos, una exhibición de imaginación, pirotecnia y momentos emocionantes. Repasamos las últimas.
1

Barcelona 1992
Barcelona 92 supuso, para varias generaciones de españoles, un verano de entusiasmo contagioso, de exaltación de la amistad al son de la rumba catalana, de imágenes imborrables: desde el encendido del pebetero con una flecha de punta flamígera a cargo de Antonio Rebollo hasta el Mediterráneo imaginado por La Fura Dels Baus.
2

Atlanta 1996
Un espectáculo colosal, con coreografías gigantescas y un momento muy emotivo: Mohamed Alí prende la llama con mano temblorosa , enfermo de párkinson.
3

Sidney 2000
Iconos de la cultura australiana , desde criaturas marinas hasta flora y fauna locales, pasando por el pasado aborigen y la presencia de grandes navegantes en sus costas, como James Cook.
4

Atenas 2004
Eros, dios del amor, nos condujo a través de las civilizaciones minoica, micénica, clásica y helenística ; nos presentó a los héroes (como Alejandro Magno) y, finalmente, al símbolo del Mediterráneo (el olivo).
5

Pekín 2008
China presumió de músculo: 2.008 percusionistas, niños de 56 grupos étnicos, un pergamino gigante y pirotecnia sin límites para una ceremonia cuyo coste casi alcanzó los cien millones de euros, la más cara de la historia.
6

Londres 2012
Tras el dispendio chino, el buen gusto «british». Con el director Danny Boyle a los mandos, las principales escenas fueron las representaciones de la Revolución Industrial, el Servicio Nacional de Salud y el patrimonio literario, musical y cultural. Iconos pop y el «sketch» de James Bond y la Reina lanzándose en paracaídas (combinando imágenes reales de Su Majestad y el actor Daniel Craig en el Palacio de Buckingham con el salto protagonizado por dobles). Y Sir Paul McCartney interpretando un apoteósico «Hey Jude» .