Rebelión contra los filiales

El Sevilla Atlético acaricia la Segunda división después de su triunfo este domingo en el campo del Lleida (0-1). Aunque otros filiales como Villarreal B y Real Madrid Castilla también se clasificaban para disputar los playoff de ascenso, eran eliminados y la próxima temporada volverán a militar en Segunda división B . Una categoría en la que se escuchan voces críticas contra la presencia de equipos de las canteras de los grandes clubes. Las enormes diferencias presupuestarias aparecen como principal argumento de los presidentes que consideran que los filiales adulteran la competición.

A diferencia de otros países europeos, la idea de crear una liga de filiales no termina de cristalizar en el fútbol español, a pesar de que incluso la LFP anunció en su día la intención de ponerla en funcionamiento en la temporada 2010-11 . Una competición que englobaría a los equipos canteranos de los 42 equipos de Primera y Segunda. Los clubes de la categoría, sin embargo, no fueron capaces de alcanzar un acuerdo e incluso surgieron críticas por parte de entidades que veían en la presencia de los filiales un atractivo para sus taquillas. La idea de esa liga sigue apartada en el cajón mientras defensores y detractores siguen sin ponerse de acuerdo.

Uno de los dirigentes críticos con esta presencia de filiales en la categoría de bronce es Juan Serrano , presidente del histórico Alcoyano , que esta temporada ha militado en el Grupo III. «Clubes modestos como el nuestro, que sobreviven como pueden en el día a día, no pueden competir ante economías como las del Barcelona, que destina 10 millones de euros a su cantera», explicaba este lunes a Efe el responsable del conjunto alicantino. En su opinión la presencia de estos equipos adultera la competición y especialmente en aquellos grupos, como ha sido el del Alcoyano esta temporada, en el que coinciden varios clubes de cantera. Cinco filiales (Barcelona, Valencia, Villarreal, Español y Levante) han sido rivales de los alicantinos.

«No solo se llevan a los mejores sub 23 del mercado, sino que ahora encima van a por los mejores de la categoría», se ha quejado Serrano, que cumple su séptima temporada al frente de la presidencia del Alcoyano. En este sentido, el dirigente puso el ejemplo de Alfaro, «un jugador con el que nos gustaría contar, pero que tiene ofertas del Barcelona y el Valencia y lo tenemos muy complicado». «Cuando un filial se mete por el medio, su precio se duplica o hasta triplica y lo único que están consiguiendo es adulterar la competición», ha denunciado.

Por eso, Serrano adelantó su intención, como representante de los clubes del Grupo III, de trasladar su queja a la Comisión Mixta de Clubes de Segunda B que se celebrará antes de final de mes en Madrid.