Fútbol
El afán de protagonismo de Cantona
Al jugador francés se lo conoce por su calidad dentro del terreno de juego y por sus salidas de tono fuera de él
Al jugador francés se lo conoce por su calidad dentro del terreno de juego y por sus salidas de tono fuera de él
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«El Mundial lo ganó Cataluña, no España»
Es la última de las frases de Eric Cantona que ha generado polémica. El exfutbolista comentó que el Mundial de 2010 lo había ganado España con siete jugadores catalanes . «Lo ganó Cataluña».
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Patada al aficionado
Sin duda, la imagen por la que, tristemente, se conoce más a Cantona es en la que aparece dando una patada a un seguidor del Crystal Palace. El francés, que jugaba en el Manchester, fue expulsado y cuando se dirigía al vestuario fue increpado por un aficionado del equipo rival. La respuesta fue contundente: soltó una patada de judoca hacia quien le gritaba. Fue sancionado con ocho meses, 120 horas de servicio comunitario como rehabilitación. Además, ya no volvió a vestir la camiseta nacional francesa, a pesar de haber sido elegido capitán. Nunca dejó claro si se arrepintió por la acción. Preguntado por aquello, el futbolista contestó: «Cuando las gaviotas siguen el pesquero es porque creen que se echarán las sardinas al mar»
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«Soy yo»
Otra de sus frases célebres y que determinaban su personaje fuera del campo la expresó al ser preguntado sobre quién era el mejor jugador francés, Zidane o Platini. «Ninguno, soy yo».
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Insultos al seleccionador francés
Después de la patada se quedó sin jugar con la selección, pero ya había sido apartado de los posibles convocados en 1988 durante doce meses. Con 22 años insultó al seleccionador Henri Michel al llamarlo «saco de mierda».
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Su mejor momento
Cuando decidió retirarse, en 1997, todos le preguntaron con qué momento de su carrera se quedaría. Jugó 432 partidos y marcó 161 goles; ganó siete ligas (dos con el Marsella, una con el Leeds United y cuatro con el Manchester United), tres Copas (Montpellier y dos con el Manchester United), y dos Charity Shields (Leeds y Manchester). Pero su respuesta siempre fue: «Tengo muchos buenos momentos, pero mi favorito es cuando le di la patada al hooligan».
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Retirada
A los 30 años se cansó de jugar, y así de claro lo dijo: «Dejé de jugar al fútbol porque ya había hecho todo lo que tenía que hacer. Necesitaba algo que me ilusionara tanto como me había ilusionado el fútbol».
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Balonazo al árbitro
Cantona tenía mucha calidad con el balón en los pies, pero se le cruzaban los cables de vez en cuando. Como en esta ocasión, cuando militaba en el Nimes, en la que el árbitro paró el juego y el francés le lanzó el balón. Por supuesto, fue expulsado de inmediato.
