Liga BBVA | Jornada 17
El Rayo Vallecano amarga el adiós de Contra
Los franjirrojos remontan el gol inicial y asaltan una vez más el Coliseum Alfonso Pérez (1-2). El técnico afirma que «si no estuviera ilusionado, no me marcharía»
El Rayo Vallecano ganó 1-2 al Getafe y amargó la despedida de Cosmin Contra del banquillo del conjunto azulón, que suma cuatro temporadas consecutivas, todas desde que ambos equipos coinciden en la Liga BBVA, perdiendo en el Coliseum Alfonso Pérez el derbi de los humildes.
El adiós del técnico rumano comenzó muy bien para el técnico rumano, que celebró desde el banquillo el tanto de Álvaro Vázquez en el tercer minuto del partido. Sin tiempo para asentarse sobre el terreno de juego, el equipo de Paco Jémez vio como sus rivales se adelantaban en el marcador con una falta perfectamente ejecutada por el delantero catalán.
No fue un contratiempo para el Rayo Vallecano, que saltó al césped del Coliseum Alfonso Pérez con las ideas muy claras pese al sistema que planteó su entrenador. Como casi siempre, Jémez fue muy atrevido y salió con solo tres defensas. La idea era clara: ir a por el partido.
No en vano, el estadio del Getafe es terreno abonado para las victorias del Rayo Vallecano. Todas sus visitas, solo tres en Primera División, se habían saldado con un cien por cien de puntos para el club que preside Raúl Martín Presa. Paco, sin duda, salió a por la cuarta.
Había muchas posibilidades de que llegara. Pese al tanto de Álvaro Vázquez, el Getafe no vive sus mejores momentos en los despachos y eso siempre influye. En cuanto llegue el dinero desde China, Contra y Míchel se irán al Guanghzhou. Hasta que llegue ese momento, todo han sido especulaciones.
Tampoco han ayudado las graves lesiones de Ángel Lafita y Babá Diawara, que estarán fuera de los terrenos de juego seis y tres meses, respectivamente. Ni el tema Pedro León, que aún colea porque el murciano continúa empezando los partidos desde el banquillo.
Pese a todas estas historias, el Getafe consiguió adelantarse en el marcador. Fue en una jugada aislada, casi la única de ataque que provocó en todo el primer acto. Sus jugadores fueron incapaces de crear jugadas peligrosas. Solo Jorge Sammir volvió a merodear la portería de Toño con un disparo flojo y sin peligro.
El verdadero dominador del choque fue el Rayo Vallecano. Suya fue la pelota y el control del juego así como las ocasiones, protagonizadas en su mayoría por Alex Moreno, que encontró una autopista por la zona de Juan Valera, incapaz de detener todas las internadas del extremo catalán.
Sin embargo, éstas no encontraron su premio. El rematador fue siempre Leo Baptistao, que estuvo poco acertado en los metros finales. Tuvo unas cuantas ocasiones, pero ninguna encontró su premio.
Solo lo consiguió Jozabed Sánchez y tuvo que ser tras una mala salida de Vicente Guatia, que despejó mal un balón y, lejos de la portería, no pudo evitar el remate del jugador del Rayo Vallecano desde fuera del área. El empate hizo justicia en un marcador que aún tendría que moverse en la segunda parte.
Contra movió el banquillo y sacó al campo a Pedro León. Karim Yoda, perdido en regates imposibles, no aportó nada. Era la hora del murciano, que con poquito más jugó mejor que el francés. Aún sigue conservando un guante en su bota derecha y a punto estuvo de sorprender a Toño en el segundo balón que tocó.
El portero del Rayo, fuera de todos los planes de Paco Jémez hace no mucho tiempo, completó un partido muy seguro. Tras la ocasión de Pedro León, ya con 1-2 en el marcador, salvó otro gol azulón después de un cabezazo de Juan Rodríguez.
Esa diana que adelantó al Rayo la hizo Raúl Baena, cuando el Getafe parecía despertar. Era el minuto 63 y aún quedaba mucho tiempo por delante. Paco, al contrario que en otras ocasiones, decidió ser más conservador y sacó del césped a Alberto Bueno y a Alex Moreno. El plan era aguantar el resultado y matar a la contra.
Pero no hubo más. Apenas una jugada en la que Toño pudo empañar su buen partido con un error que a punto estuvo de aprovechar Álvaro Vázquez y un remate de Mateus Manucho que salvó bajo los palos Alexis Ruano.
Al final, el Rayo, como marca la tradición, se llevó los tres puntos del Coliseum. Ya tiene 20, tres más que el Getafe, que no consigue dominar a su vecino humilde. Por resultados entre ambos, es el cuarto equipo de la comunidad de Madrid. Contra no pudo evitar otra derrota ante el cuadro de Paco Jémez, que amargó la despedida del rumano.
Palabras de despedida de Contra
Al término del partido, Cosmin Contra se despidió de su club tras oficializarse su fichaje por el Guangzhou de China y afirmó que si no tuviera ilusión por cambiar de equipo no habría decidido dejar al conjunto madrileño. El técnico rumano dejará cuatro millones de euros en las arcas del Getafe, que, con ese dinero, podrá pagar las nóminas que adeuda a algunos de sus jugadores. Después de un par de semanas de especulaciones sobre su salida del club, Contra confirmó su marcha junto a su presidente en rueda de prensa tras perder con el Rayo Vallecano.
«Quiero agradecer al presidente la oportunidad de entrenar en Primera, también a los jugadores. Quiero dejar claro que ha aparecido alguna noticia en la que se decía que no quería marcharme. Eso no es verdad. He estado seis años maravillosos aquí y espero que solo sea un adiós y que nos veamos pronto. Gracias al presidente y al club por entrenar en Primera. Le deseo toda la suerte del mundo al nuevo entrenador», dijo.
«Si no estuviera ilusionado, no me marcharía. Dejo un gran club, dejo mi casa, pero me voy ilusionado a una gran experiencia a un campeonato que mueve mucho dinero. Soy joven, tengo ilusión de trabajar y de hacer grandes cosas», agregó.
Contra, que quintuplicará su ficha en el Guangzhou chino, reconoció que no tendría inconveniente en volver a entrenar al Getafe en el caso de tener la opción de volver a España. «No tengo ninguna duda que volvería encantado donde está mi casa, y el presidente lo sabe. No hay ningún problema. Si me quiere, trabajaremos juntos. Pero lo que quiero ahora es que el Getafe se salve cuanto antes», comentó.
Noticias relacionadas
