Un ultra del Frente: «Lo siento por él, pero sabía a lo que se exponía»
Alarmantes declaraciones de un radical del Atlético de Madrid: «Yo en mi ciudad impera lo que yo diga, cuando voy allí sé que puedo no volver»
«Los estábamos esperando», aseguró en declaraciones a Cuatro un ultra del Frente Atlético que participó en la multitudinaria pelea del pasado domingo contra seguidores de los Riazor Blues , antes del partido contra el Deportivo, que se saldó con varios heridos y un fallecido del club gallego, Francisco Javier Romero Taboada , alias «Jimmy».
«Esto no se para. ¿Por qué voy a parar con esa gente? No tiene que parar»
Sin embargo, para este seguidor radical, la batalla vivida a orillas del río Manzanares «tampoco fue nada del otro mundo. Otros días ha sido mucho más duro». « Pensamos que podían llevar navajas , porque esta gente es así y suelen llevarlas. Son un poco cobardes –declaró–. Entonces decidimos guardarnos unos palos, por si acaso se les ocurría llevarlas. No estaba pactado, porque en este tipo de peleas se pacta todo, lo que se lleva y lo que no. En este caso no podían llevarse armas, era a mano abierta. A guantazo limpio, como suele decirse. No respetaron las normas y tuvimos que sacar los palos. Luego pasa lo que pasa ».
Ocultado tras una capucha y de espaldas a la cámara para ocultar su identidad , el ultra rojiblanco asegura que estos enfrentamientos ocurrirán «cada vez que vengan ellos aquí o yo vaya allí. Es que esto es así, no hay otra historia. Está escrito, ni se olvida, ni se perdona. Siento mucho que haya caído. Ese no es tampoco el fin último. Lo que se intenta es dar una lección, no acabar con la vida de nadie . Tampoco somos animales. Yo lo siento por él, pero sabía a lo que se exponía», explica, al tiempo que aclara que él no dio «ninguna puñalada a ninguno, sí un palazo a uno o dos, pero no una puñalada».
Para el radical colchonero, este tipo de encuentros « no son niñerías » e, incluso, les encuentra una justificación: «Yo no les gusto a ellos y ellos no me gustan a mí. No quiero que esa gente esté en mi país y ellos no quieren que yo esté en el suyo. De hecho, hay gente que estuvo allí que no iba al fútbol, porque esto no tiene nada que ver con el fútbol. Que dejen al fútbol en paz, esto es ideología pura y dura».
«Cuando estén en mi ciudad, impera mi ley. Y cuando esté yo en la suya, ya me ocupo yo de correr. Yo soy consciente de lo que me puede pasar. Cuando voy allí, soy consciente de que, a lo mejor, no vuelvo», añade, antes de sentenciar: « Esto no se para . ¿Por qué voy a parar con esa gente? No tiene que parar»
Noticias relacionadas