La incertidumbre de los Bulls

La temporada de los Chicago Bulls está tan llena de altibajos como se presupone su camino hacia el título. Las lesiones y la falta de sintonía inicial entre algunas de sus estrellas han llevado a los Bulls a encarar el tramo final de la liga regular lejos de las dos primeras posiciones del Este y empatados con los Raptors por el tercer puesto de la clasificación. Un lugar de privilegio que los de Thibodeau intentarán conquistar en los tres partidos que aún le restan antes de los playoffs, ya que lograrlo supondría medirse a los Bucks y, de paso, evitar el siempre complicado trance de viajar a Washington para enfrentarse a los Wizards, su verdugo del año pasado en primera ronda.

La diferencia mínima entre los Raptors y los Bulls en la clasificación de la Conferencia Este significa un mundo traducida en términos de playoffs. Milwaukee Bucks, un equipo descosido por los traspasos, aparece como rival asequible en primera ronda para el tercer clasificado del Este, mientras que al cuarto le esperan los inesperados Wizards de John Wall. Un conjunto capaz de ganar a cualquier si tienen el día y que ya el año pasado eliminaron a los Bulls.

Con ese panorama, los cinco días que aún restan para el final de la liga regular se antojan claves para Chicago, que una vez recuperado a Derrick Rose lucha por afinar su puesta a punto para la postemporada. Esta noche puede decidirse buena parte del dilema. Los Bulls recibirán en el United Center a los Sixers, el peor equipo del Este junto a los Knicks, en un partido que se antoja sencillo para el equipo de Pau Gasol y Mirotic, mientras que los Raptors jugarán en casa de Miami, donde hace unas horas vencían los Bulls.

A los canadienses les quedarían aún dos encuentros más, uno a domicilio en casa de los Celtics y otro más, en casa, frente a los Hornets. Ambos equipos se podrían estar jugando su pase a playoffs. Los Bulls, por su parte, tienen que visitar a los Nets –otro aspirante a la postemporada– y recibir al mejor equipo del Este en casa, los Atlanta Hawks, para cerrar la fase regular. Cinco días de infarto que marcaran el camino de Pau y Mirotic hacia un anillo con el que sueña Chicago desde hace muchos años.