Copa del Rey
El talento de Abrines y Hezonja lleva al Barça a semifinales
Los dos jugadores más jóvenes de la plantilla azulgrana fueron la clave del triunfo catalán ante un buen Valencia Basket
El Barcelona es el primer semifinalista de la Copa del Rey tras superar a un Valencia peleón que terminó por sucumbir ante el fondo de armario del conjunto azulgrana. Igualado durante la mayor parte del partido, Abrines decidió con un gran último cuarto que sitúa a los catalanes a dos pasos del título. [ Estadísticas del Barcelona-Valencia Basket ]
Las dudas del Valencia antes de comenzar el encuentro se disiparon de golpe. La Copa suele tener ese efecto distorsionador de la realidad. Como si de repente los problemas se olvidaran y fluyeran las virtudes. Apenas un mes después de haber despedido a su técnico y una semana más tarde de perder con el Real Madrid en su cancha, los valencianos eran otro equipo. Quizá ayudó el hecho de medirse al Barcelona, en un duelo sin presión en el que nada tenían que perder y que se mantuvo igualado durante muchos minutos.
La salida entonada del conjunto de Xavi Pascual hizo temer un duelo desequilibrado. Doellman era el encargado de liderar el ataque azulgrana. Su rostro de niño bueno, cabellera rubia y cara de no haber roto un plato, invita a dejarle pasar. El americano sumaba con facilidad ante la débil resistencia valenciana.
Mandaban los ataques, para desesperación de Xavi Pascual, que movía el banquillo en busca de un antídoto para la muñeca de Dubljevic y Pablo Aguilar. Fue la movilidad de los pívots naranjas lo que más incomodó al Barça en el primer tiempo, en el que a cada estirón azulgrana respondía bien el equipo de Carles Durán.
En uno de esos cambios de piezas, Hezonja demostró que está listo para todo. El joven croata, perla de la cantera, exhibió calidad y desparpajo en el primer cuarto con ocho puntos en siete minutos y un triple sobre la bocina para acabar el primer cuarto (25-21) y después demostró que aún le queda madurar, con una técnica en el tercer período que le pudo costar más cara. Un ímpetu que pone de relieve su carácter ganador.
Ribas da esperanzas al Valencia
El buen arranque del segundo período puso al Barça siete arriba y encendió las alarmas en el banquillo contrario (30-23). Ribas y la línea de triple sofocaron otro fuego, pero al Valencia se le acumulaban los problemas. A Doellman y Hezonja se sumó el acierto de Oleson y la omnipresencia de Tomic, lo que dejó la distancia al descanso en seis puntos (44-38).
Regresó dispuesto a resolver el choque el Barcelona, consciente de que si ganaba le esperaba un partido muy duro en semifinales y había que guardar fuerzas. Lo intentó con las mismas armas, pero incrementando el nivel defensivo, su talón de Aquiles en la primera parte. Entró en barrena el Valencia, que llegó a ponerse diez abajo (57-47, min. 26) tras un triple de Oleson.
Loncar y Ribas le devolvieron el color a los naranjas (59-53), lejos aún de la remontada, pero siempre dentro del partido, sin dejar un ápice de descanso al Barcelona. Creyó siempre el Valencia, acunado por la afición grancanaria, que llegó a ponerse a tres puntos en el inicio del último cuarto (62-59). Un momento de crisis que solucionó Abrines con dos fogonazos de su calidad. Dos triples consecutivos con los que el Barça puso rumbo a semifinales a pesar del arranque de casta final de los valencianos, que nunca bajaron los brazos.
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