giro de italia - etapa 20
Así se hacen los nuevos controles a las bicicletas
Los comisarios de la UCI introducen una cámara en el cuadro de la bici para rastrear si hay un motor de batería
Hace cuatro años que se insinuó públicamente por primera vez (se acusó de forma velada a Cancellara) y hace unos meses que un ingeniero húngaro, Itsvan Varjas, lanzó un inquietante mensaje a la revista suiza L'Ilustre. “Es un sistema que puede instalarse en cualquier bicicleta”. Y exageró : “Se pueden alcanzar los 90 kilómetros por hora”. Hablaba Varjas de un pequeña batería motorizada, del tamaño de un USB de 500 gramos, una potencia de 600 watios y una autonomía de 60 minutos. Hace menos de un mes, el periódico L'Equipe publicó una doble página en la que alertaba de “una bomba de efecto retardado”, los motores en las bicicletas.
La Unión Ciclista Internacional (UCI) se ha lanzado a rastrear el tema para saber que hay de cierto en esta alerta. El jueves realizó un control técnico a la bici de los principales protagonista s de la etapa: Contador, Hesjedal, Gilbert, Nocentini y Elissonde. No encontró ninguna irregularidad.
El procedimiento es el siguiente. Un comisario de la UCI desmonta el sillín y la tija de la bici e introduce una cámara en el interior del tubo del cuadro. Desarma y coronas y piñones y analiza si hay algún USB en cualquier cavidad de la bicicleta. La UCI dedica 10 millones de euros anuales para el trabajo de los inspectores antidopaje y los comisarios técnicos que ahora examinan las bicicletas.
Hasta el momento, ninguna bicicleta ha sido declarado “culpable”. Según la información publicada en su día por L'Equipe, el ingenio motorizado se habría vendido ya a un precio de 15.000 euros. Durante el Giro se han realizado dos controles de bicis: uno en Albega y otro, el jueves en Verbania.
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