A 1.089 KILÓMETROS DE LA GLORIA

De punta a punta de la geografía española, pero con la ilusión por bandera. Así viajará el Atlético Sanluqueño a tierras catalanas este fin de semana. El equipo verdiblanco se juega en El Prat de Llobregat algo más que 90 minutos de fútbol, allí se ponen en juego dos décadas de esperanza por regresar a la categoría de bronce del balompié nacional. No será la última opción de conseguir el ansiado ascenso, pero sí la más directa. Por eso, Sanlúcar de Barrameda se volcará para que uno de sus equipos, el Atleti, toque la gloria con las manos. La ocasión lo merece y hay que ir a por todas.

El de los sanluqueños sería el ascenso del esfuerzo, de la dedicación y de la constancia. A lo largo de 20 años, el Atleti (o 'la Leti', como cariñosamente es conocido en su tierra) ha sido fiel a su estilo y no ha perdido la calma. En todo este tiempo se ha convertido en todo un clásico del Grupo X, donde siempre ha mostrado su competitividad. En ocasiones para evitar el temido descenso de categoría y, otras veces, para luchar por un premio que nunca llegó, aunque se tocó con la punta de los dedos.

El Poli Ejido y un único punto lo evitaron en la 95-96, temporada en la que en Mérida se truncó el anhelado sueño. El refundado equipo emeritense volvió a cruzarse en su camino en el 'play off' del curso 00-01, mientras que la última pesadilla se firmó en la 05-06 cuando dos goles de Diego Segura provocaban un empate entre el Betis B y el Sanluqueño de Nolito (2-2) que perjudicaba a ambos y colocaba a la Balona entre los cuatro primeros para optar al ascenso.

Llega una nueva oportunidad. Fran, Castillo, Ezequiel, Dani, Jorge Herrero, Abel Luque, Abel Calatayud, Óscar Silva y Adrián Gallardo, entre otros, tienen en sus botas la oportunidad de devolver a un equipo que siempre ha apostado por la cantera. La Segunda B es posible y El Palmar (estadio con olor a fútbol) ya la espera con las puertas abiertas.