Un gol de Expósito en el alargue desata la locura en el Cuvillo

De auténtico infarto. El Racing volvió a recurrir a la prolongación para dar un paso más, éste casi decisivo, hacia la permanencia en Tercera. Tal y como sucedió hace dos semanas, Álex Expósito anotaba un gol en el alargue y el José del Cuvillo estallaba de júbilo. Ante los albirrojos fue para sumar un empate, ayer se consiguieron los tres puestos en litigio ante el Conil cuando los nubarrones ya se dejaban notar por El Puerto.

Saltaba el Racing al rectángulo de juego sin su capitán Lolo Prado en el once y el Conil dejó claro desde el primer momento que, aunque estaba salvado, no iba a ponerle las cosas fáciles a los hombres de David Galisteo.

Las imprecisiones y los nervios hicieron acto de presencia en El Puerto durante el primer periodo. Nene, Benítez, Álex Expósito y, sobre todo, Chico Benítez, con un disparo desde el interior del área que se fue a las nubes, crearon las ocasiones más peligrosas de los rojiblancos.

Fran Mejías, Migue y Lozano fueron los principales incordios visitantes sobre el marco de un Borja que fue aplacando los nervios con el paso de los minutos.

El empate no era un buen resultado para los portuenses, que tenían la obligación de ganar al no fallar sus principales rivales en la zona baja de la clasificación. Y el Racing salió a por todas en la segunda mitad. Álex Expósito contó con las mejores ocasiones y en una de ellas, el ariete estrelló el balón en el palo (50').

En la recta final, Borja sacó de la escuadra un balón lanzado por Migue (86'), pero fue en una contra eléctrica cuando se desató la locura. Expósito recogió un pase de Benítez y fusiló a Carrasco. ¡Apoteósico!