Vencido. José Mari se tapa el rostro con la camiseta tras uno de los cuatro goles del Valladolid. :: JAVIER FERGÓ
LA CRÓNICA

El Valladolid golea a un Xerez dormido

El Xerez cae goleado, con dos penaltis en contra, ante el Valladolid, aunque sigue a ocho puntos de los puestos de descenso

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Con ganas de exculpar los pecados, de arrepentirse y ejercer una penitencia justo ahora que acaba la semana santa. Así se encuentra la plantilla del Xerez Deportivo después de encajar ayer una justa goleada, donde no hubo ni intensidad ni pundonor, ante un Valladolid que fue todo lo contrario.

Chapín volvía a mostrar una de sus peores caras de la temporada, una vez más. Semana de Pasión, puente de Semana Santa, partido televisado... Aún así, los de siempre no fallaron para presenciar el intento xerecista por alejarse de la zona baja de la tabla y lograr los tres puntos después de dos empates consecutivos. Esa era la idea inicial, ya que fue el Xerez quien dispuso del balón en los primeros instantes de partido. Por mucho que dijeran en Pucela, el mando lo llevó el equipo de Moreno y los de Djukic esperaban el fallo de los azulinos para salir a la contra. Partido de pizarra, por tanto, desde el minuto uno.

En menos de diez minutos los xerecistas avisaban, con jugadas bien trenzadas y José Mari como principal escollo de la zaga del Valladolid. Un balón bien centrado por Campano, un puñal por la diestra, lo cabeceaba el delantero sevillano cerca del poste izquierdo de la portería rival. La reacción fue inmediata por parte de los blanquivioletas, ayer de negro y morado pasión, muy propio. Una jugada sin aparente peligro acaba con un cabezazo de Nauzet que golpea en el brazo de Robusté y Arias López que pita una pena máxima que no desperdicia Víctor Pérez para poner por delante al Valladolid en su primera aproximación a la portería de Doblas. Tocaba sufrir ante un equipo que nunca había ganado en tierra jerezana.

El gol del Valladolid aupó un poco a la afición y el equipo captó el mensaje, aunque el cuadro pucelano sabía lo que se hacía. El balón seguía siendo del Xerez, ahogando la zona de creación con Álvaro Rubio y Víctor Pérez y dando pocas opciones en ataque a los de Moreno, con la excepción del balón parado. El Xerez arriesgaba para irse con el empate al descanso, un riesgo que aprovechó el tercer mejor equipo de la categoría. Campano evitó el segundo tanto visitante al despejar in extremis un centro de Javi Guerra a Bueno, que se quedaba solo para rematar a gol. Riesgos y nervios, los previos al segundo gol pucelano. Javi Guerra peina a zona de nadie el balón y aparece Óscar que se planta solo ante Toni Doblas y aleja al Valladolid en el marcador. Mal la zaga en la marca y mucho desajuste entre los defensas. Fue un gancho directo a los de Moreno, que parecían estar cerca de besar la lona, aunque mejor esperar al segundo asalto. Eso sí, Javi Guerra pudo haber matado el partido en la prolongación, aunque no supo finalizar ante Doblas.

Cambio de planes

Djukic había obligado a cambiar el guión del partido a Moreno con los dos goles de su equipo y el entrenador del Xerez borró el trivote del verde y optó por un clásico 4-4-2 con Tato en ataque, que entró sustituyendo a Bruno. Una decisión que a priori sorprendía, ya que tanto Rueda como Maldonado parecían menos participativos que el jerezano. Los inicios de la segunda mitad parecían idénticos a los de la primera, con el equipo azulino llevando el mando del balón, pero chocándose de frente una y otra vez ante el Valladolid. Y como era un calco, pues no podía faltar un nuevo penalti. Otra vez Robusté, que intenta despejar y golpea a Nauzet Alemán, encargado de tirar la pena máxima y lograr el tercer gol de los pucelanos.

Ahora sí que el equipo besaba la lona con KO directo incluido. El Valladolid se gustaba lo suficiente como para tocar y tocar hasta plantarse ante Doblas. Jugada de tiralíneas con posible fuera de juego de por medio incluido y centro de Bueno que remata a placer Javi Guerra. Cuarto tanto de los pucelanos, de momento la mayor goleada encajada por Moreno, y que dejaba 'grogui' a los azulinos, quienes seguían intentando llegar al área rival, aunque sin mucha cabeza, con juego directo, algo de alma, pero pocas ganas. Solo de acabar, aunque quedaba un buen tramo de partido y había que finalizar con la moral intacta para así evitar complicarse la vida en lo que queda de temporada. Los puestos de descenso siguen estando a ocho puntos, pero el Xerez recibió ayer un golpe demasiado duro en el momento clave del campeonato liguero, algo que podría pasar factura.