Griñán se deja querer por los sindicatos
El candidato insta a defender «con uñas y dientes» la herencia de una sanidad y educación públicas de calidad a los hijos CC OO y UGT piden no votar al PP en un acto con el candidato socialista
MÁLAGA. Actualizado: GuardarDel debate a tres fallido al 'menage a trois' de hecho. Griñán consolidó ayer su alianza con los sindicatos mayoritarios UGT y CC OO. Definitivamente se han convertido en su bote salvavidas estas elecciones. Las declaraciones de los máximos responsables de UGT y CC OO, Manuel Pastrana y Francisco Carbonero, pidiendo que no se vote al PP supuso un paso más en esta relación de conveniencia.
Pastrana y Carbonero accedieron a reunirse con Griñán en la sede regional del PSOE en Sevilla. No es la primera vez que lo hacen. Hay viejas amistades desde que Griñán fue consejero de Economía y Hacienda y participaba en los acuerdos de concertación. Tampoco es inusual que los sindicalistas escuchen las propuestas de los candidatos de izquierdas; y de derechas. Se han reunido con Arenas en la sede del PP alguna vez. Pero no es tan frecuente que los sindicatos se mojen tanto en una campaña electoral.
Pastrana y Carbonero arremetieron contra el PP sin piedad por poner «en riesgo» los derechos sociales conseguidos y dejaron claro que dirán a sus afiliados que no le voten, aunque nunca pronunciaron ni las siglas del partido conservador ni el nombre de Javier Arenas. «Nunca hemos pedido el voto para nadie». «Le hemos hecho cinco huelgas generales a los gobiernos del PSOE y dos a los del PP» dijo Carbonero. «Desde 1988 no pedimos el voto para ningún partido», añadió Pastrana. Pero... Los peros revelan que esa imparcialidad no es tanto en estas elecciones.
Carbonero declaró la sintonía de CC OO con las propuestas de Griñán para la defensa de los derechos sociales que recoge el Estatuto de Autonomía. Por contra, denostó al Gobierno del PP, especialmente a su ministro de Educación, por decir que no se necesitan becas Erasmus para los jóvenes porque nuestro sistema universitario funciona bien. «Eso, para que solo los hijos de los ricos puedan ir a estudiar fuera», soltó. Pero donde Carbonero desveló su sintonía con Griñán es con una frase que el presidente y candidato socialista repite con frecuencia: «Tenemos la mejor sanidad, no de España, sino de Europa». El PP de Arenas ha criticado numerosas veces el sistema sanitario andaluz.
El más explícito con los guiños al voto de izquierdas fue Pastrana. Dijo que en UGT no hay miedo a que gobierne la derecha en Andalucía. Explicó que la táctica del sindicato es no pedir el voto para nadie desde que en 1988 se divorció del PSOE en aquella trifulca tan famosa entre Felipe González y Nicolás Redondo. «Pero sabemos quienes están atentando contra nuestros derechos», dijo en refrerencia a la reforma laboral y los recortes de Rajoy. «Vamos a advertir a cada uno de los trabajadores que no se dejen engañar por quienes les están robando sus derechos; que no vote a aquel que atenta contra sus derechos», remachó.
No piden el voto para PSOE
Carbonero y Pastrana no pidieron el voto para el PSOE, es cierto. De hecho se reúnen hoy con Diego Valderas y es previsible que digan lo mismo. Pero está claro que la foto de ayer con el candidato socialista en plena campaña tiene una intención clara, la de remolcar a un PSOE semihundido a la tierra prometida, la de la posibilidad de gobernar tras el 25M si el PP no consigue la mayoría absoluta. «El 25M se juega algo más que un cambio de gobierno, se confrontan dos modelos», dijo Pastrana, frase que Griñán repite en cada acto.
Herencia y duquesa de Alba
Pero Griñán también copió ayer a Pastrana. Hizo suya una reflexión del sindicalista en un mitin en Jerez por la noche. Griñán manifestó que el cambio que promete Arenas suena «a cachondeo» porque lo que ha traído el Gobierno de Rajoy es más paro, despido barato y menos becas y privatización de la sanidad. El socialista dijo que igual que los ricos hacendados legan cortijos a sus herederos, los humildes solo pueden dejar la herencia a sus hijos de una sanidad y una educación pública de calidad. «Esa es la herencia, y si nos la tocan la defenderemos con uñas y dientes». Pastrana había ilustrado la metáfora con un ejemplo: «Si a la duquesa de Alba le quitaran un cortijo, montaría la de dios es cristo, Montar el cristo es lo que tenemos que hacer».
En Jerez mantuvo un encuentro con agricultores de varias comunidades de regantes. Les prometió ayudas para autoabastecese de energía eléctrica ante la millonada que pagan de luz y en interceder al Gobierno para que les baje el 18% del IVA. En la tierra de Arias Cañete, ministro de Agricultura, Griñán se mostró institucional: «Sobre ese tema podéis hablar con Cañete, yo también lo haré». Por un momento se le olvidó que estaba allí como candidato.
Griñán estuvo acompañado de Luis Pizarro, cabeza de lista por Cádiz y con quien tuvo fricciones hace un año. Pelillos a la mar. Ayer el político de Alcalá barría en el mismo bando. El candidato socialista sigue exultante y complacido de cómo van saliéndole las cosas. El debate en Canal Sur le ha dado más alas. «Me sentí cómodo, pero tenía la impresión de que me faltaba algo, alguien que no daba la cara», dijo en referencia a Javier Arenas, a quién acusó de «faltar el respeto a los ciudadanos» por su negativa a acudir al debate en Canal Sur.
En el mitin de Jerez el candidato se topó con la primera protesta. Varios funcionarios de Jerez que llevan 4 meses sin cobrar se apostaron a las pueras del hotel para recibirle con abucheos. El candidato salió por la puerta de atrás.