
Rubalcaba acude al rescate de Griñán
Andalucía mantiene su peso en la ejecutiva federal con seis miembros, entre ellos el incombustible Gaspar ZarríasLo sitúa en la presidencia del PSOE para reforzar su imagen cara al 25-M tras apostar por Chacón
SEVILLA. Actualizado: GuardarEn la batalla por liderar el PSOE, José Antonio Griñán jugó sus cartas apostando por Carme Chacón y terminó como uno de los grandes perdedores del 38º congreso federal. El presidente de la Junta de Andalucía quedó en una debilitada posición en el peor momento posible ya que el 25 de marzo opta a la reelección en las elecciones autonómicas. Una cita con las urnas que se presenta como la primera prueba de fuego para Alfredo Pérez Rubalcaba como nuevo líder de los socialistas. Para contrarrestar este desfavorable escenario, el recién elegido secretario general sitúo al jefe del Gobierno regional como presidente del partido en una operación de rescate para reforzar su imagen y su figura como candidato.
«La presidencia era vital». Esta frase de la número dos del PSOE andaluz, Susana Díaz, resume a la perfección la importancia que los afines al líder del Ejecutivo andaluz daban a la consecución de este puesto, de un gran simbolismo, como medio para recomponer la maltrecha posición en la que quedó Griñán. Esta opción fue la que puso sobre la mesa la federación andaluza durante las duras e intensas negociaciones celebradas en las habitaciones del hotel Renacimiento a lo largo de la particular 'madrugá' sevillana del PSOE. Poco antes del alba hubo fumata blanca y se consumó el 'pacto del Guadalquivir' en el que se cerró la presencia andaluza en la ejecutiva de Rubalcaba.
Paradojas de la vida, hace apenas tres años, José Antonio Griñán sustituyó a Manuel Chaves -cuando fue llamado por Zapatero para entrar en el Gobierno- al frente de la Junta y poco después como secretario general de los socialistas andaluces. Ayer le sucedió como presidente de los socialistas españoles. «Es muy bonito sustituir a Manuel Chaves. Estoy bien, me siento muy a gusto con el resultado del congreso. La presidencia es un honor», afirmó el presidente andaluz a Canal Sur en sus primeras valoraciones.
Versiones opuestas
Sobre este relevo, las versiones eran opuestas. Griñán y su entorno se encargaron de explicar, por activa y por pasiva, que Manuel Chaves, presidente del PSOE desde el año 2000, había cumplido con los tres mandatos que estatutariamente le impedían continuar en el cargo.
Desde el bando 'rubalcabista' en Andalucía se explicó que la norma no afectaba a un cargo que es más simbólico que ejecutivo y se ensalzó que el expresidente Chaves diera un paso atrás para facilitar el relevo. El más contundente fue Gaspar Zarrías: «Por encima de cualquier planteamiento estatutario o normativo, Griñán es presidente del partido por la generosidad de Chaves. Es una decisión en la que ha habido un compendio de componentes humanos y personales de generosidad y también estatutarios, que yo dejaría en un segundo plano. La generosidad es el elemento que define el gesto de Manuel Chaves para que Griñán sea presidente del partido y tenga respaldo para afrontar las elecciones».
Por su parte, Chaves sostuvo que sus ambiciones políticas «están colmadas» y subrayó: «Cuando el partido me ha pedido salir lo hago con mucho gusto porque hay que saber salir y saber entrar». «Me parece muy bien que Griñán sea el presidente del partido», añadió el exvicepresidente del Gobierno, quien destacó el carácter «integrador» de la ejecutiva configurada por Rubalcaba.
«Queda estético»
Al margen de esta disparidad de criterios, la posición unánime de los secretarios generales provinciales es que la inclusión de José Antonio Griñán en la ejecutiva del partido afianza su posición como candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía. El líder del partido en Cádiz, Francisco González Cabañas, manifestó: «Queda bien y queda estético».
La cúpula del PSOE-A cerró filas con la dirección confeccionada por Rubalcaba. Susana Díaz se mostró satisfecha por la presencia de seis andaluces, con lo que la federación regional -la más numerosa- mantiene el mismo peso que en la última ejecutiva de Zapatero. Junto a Griñán figuran el incombustible jiennense Gaspar Zarrías como secretario de Ciudades y Política Municipal; la granadina María del Mar Villafranca, como secretaria de Educación y Cultura; y como vocales aparecen la malagueña María Gámez y dos sevillanos, representantes de sendas corrientes del socialismo hispalense: la alcaldesa de Lebrija, María José Fernández Muñoz, -'chaconista'- y el secretario de Política Institucional de la ejecutiva provincial sevillana y alcalde de La Rinconada, Francisco Javier Fernández de los Ríos Torres, -'rubalcabista'-.
A pesar de los mensajes apelando a la unidad para afrontar con garantías las elecciones andaluzas del 25 de marzo, fuentes consultadas explicaron que las heridas con las que llegó el socialismo andaluz al congreso federal por la división interna se han cerrado en falso y pueden reabrirse esta semana durante la elaboración de las listas para los comicios autonómicos.