Duran i Lleida: «Me preocupa que haya muchos 'mohameds'»
El diputado catalán dice estar inquieto por el aumento de inmigrantes «que no respetan los valores» de Cataluña
BARCELONA. Actualizado: GuardarDías después de levantar ampollas con los andaluces y los extremeños, a los que acusó de cobrar el subsidio de paro para pasar todo el día en el bar, el candidato de CiU por Barcelona, Josep Antoni Duran i Lleida, dirigió ayer sus últimamente ya habituales dardos envenenados al colectivo inmigrante, en especial a las personas que profesan la religión musulmana.
Duran i Lleida, que hasta la presente campaña electoral pasaba por ser uno de los políticos con mejor imagen y con un perfil más moderado, expresó su «preocupación» por que «cada vez haya más personas inmigrantes» y por que muchas de estas personas venidas de fuera no acaben de integrarse en la sociedad. Y lo hizo además en un tono y en términos despectivos hacia ese colectivo. «Me preocupa que haya muchos 'mohameds' que no se integren y que no respeten los valores de este país», señaló en una entrevista en TVE.
Duran, al que se ve más nervioso y crispado de lo normal, y que se ha visto obligado a endurecer su discurso para tratar de sacar la cabeza ante el bipartidismo reinante en la campaña, no es la primera vez que se expresa de forma más o menos ofensiva contra los musulmanes. En octubre escribió en su blog una frase que trajo cola: «Me preocupa que nazcan más 'mohameds' que 'jordis' y 'josés'», dijo entonces y repitió ayer. Ante la polvareda que levantó se limitó a afirmar que lo único que hizo fue «plasmar un titular» leído en un diario local. En otra ocasión señaló que los catalanes son «gente de acogida», con unos valores, una lengua, una cultura, un respeto al papel de la mujer, unos deberes que deben cumplirse y «quien no quiera practicar el deber de la integración, aquí no tiene nada que hacer».
Un problema
Duran siempre ha sostenido que «la inmigración es un problema y hay que decir las cosas por su nombre» y no ha dudado en culpar a los inmigrantes de la pérdida de valor de la vivienda, del descrédito de algunas escuelas públicas y del impacto negativo en la calidad de vida de los catalanes. Ayer dio un paso más y alertó de que «no pueden cerrarse los ojos ante esta realidad» (la de la inmigración). «Me preocupa que en nuestra población autóctona, por errores que hemos cometido todos de no apoyar a la familia y políticas demográficas, cada vez haya más personas inmigrantes», dijo. «La gente no abandona por ganas su pueblo. Lo hace porque busca un paraíso mejor en sociedades desarrolladas», remató.
En definitiva, una nueva salida de tono en la campaña, en la que Duran se ha enemistado con sectores tan diversos como las comunidades andaluza y extremeña, los homosexuales, afirmó que es una tendencia sexual curable, los inmigrantes o incluso la Conferencia Episcopal.
Los colectivos de trabajadores extranjeros no tardaron en reaccionar. El presidente de la Asociación Solidaria para la Integración Sociolaboral del Inmigrante (ASISI), Hassan Arabi, tachó de «irresponsable» al candidato «Estamos en campaña electoral y los políticos de derechas arañan los votos que pueden», explicó, al tiempo que reconoció que «el discurso xenófobo triunfa en época de crisis».