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La Policía requisa 57 pastillas de 'speed' en una fiesta en Jerez
Los agentes detuvieron a dos jóvenes, acusados de suministrar la droga a los asistentes de un evento organizado por Halloween
JEREZ. Actualizado: GuardarLa fiesta de Halloween que congregó a numerosos jóvenes la noche del sábado en la calle Marquetería, en el entorno del Parque Empresarial Oeste, en Jerez, acabó precipitadamente para dos de ellos con su traslado a los calabozos. El operativo puesto en marcha por la Policía para las denominadas fiestas pastilleras dio sus frutos, y los agentes se incautaron de 57 pastillas de 'speed' propiedad presuntamente de los dos detenidos.
Como informaron fuentes del caso, al filo de la medianoche los funcionarios observaron cómo un grupo de individuos rodeaba a otro produciéndose un intercambio de billetes. El sospechoso, de apenas 18 años y que responde al nombre de Rubén H. M, metió entonces la mano en uno de sus bolsillos y extrajo hasta siete papelinas de speed de dos gramos cada una. Los congregados se percataron de que los agentes los habían descubierto y huyeron a toda prisa del lugar, mientras que el supuesto vendedor no acertó a reaccionar y fue interceptado.
El segundo de los casos se produjo poco después, cuando los mismos policías vieron presuntamente a Borja C. L, de 30 años, arrojar una bolsa en los alrededores de la fiesta que contenía un total de 43 pastillas de la misma sustancia. Ambos detenidos pasaron en la mañana de ayer a disposición del juzgado de Instrucción nº 1, donde se les tomó declaración. Según las fuentes consultadas, Rubén H. M. reconoció los hechos pero se justificó asegurando que al llegar a la fiesta se dio cuenta de que había perdido el dinero que llevaba y en ese momento otra persona le dio las papelinas para que las vendiera, a 25 euros cada una.
El supuesto trato era que si el joven lograba ponerlas todas en el mercado, el suministrador le pagaría 60 euros. El chico negó, sin embargo, que le hubiera dado tiempo a materializar la transacción, asegurando que fue sorprendido antes de llevarla a cabo. Dado que carecía de antecedentes penales y como confesó su delito, la jueza decidió ponerlo en libertad hasta que se celebre el juicio, acusado de un delito contra la salud pública.
En cuanto al otro arrestado, Borja C. L, éste si negó cualquier vinculación con los hechos que se le imputan, manifestando que no fue él quien arrojó la bolsa con la droga y que los agentes lo detuvieron simplemente porque era la persona que más cerca se encontraba de la mercancía en ese momento. Esta versión no pareció convencer a la jueza, que teniendo en consideración la importante cantidad de pastillas que se le intervinieron optó por decretar su ingreso en prisión.
Los parques empresariales se han convertido en puntos neurálgicos de conflictos y tráfico de drogas. La Policía, de hecho, ha intensificado su vigilancia durante los fines de semana coincidiendo con la celebración de fiestas pastilleras.