
Zornoza tomará posesión como obispo ante 1.500 asistentes
El Obispado ya ultima los preparativos ante la llegada de centenares de personas entre jóvenes de Getafe, sacerdotes y seminaristas
CÁDIZ Actualizado: GuardarLa sede quedará vacía por unos minutos y ese será el signo visible del cambio que experimentará la Diócesis de Cádiz y Ceuta. Un punto y final para Antonio Ceballos (que pasará de administrador apostólico a obispo emérito) y la primera línea de Rafael Zornoza (que pasará de obispo electo a pontífice de plenos derechos de la Diócesis de Cádiz). Eso será el sábado, en la Catedral de Cádiz y ante miles de asistentes. Un millar y medio de gaditanos y foráneos contemplarán un momento único para la Diócesis de Cádiz: el momento del traspaso de poderes entre ambos obispos que quedará visible en la cesión de la sede, la mitra y el báculo. Ese instante preciso, que durará unos minutos será la culminación de más de un mes de trabajo en el Obispado.
En concreto, es el Colegio de Consultores (encargado del gobierno de la Diócesis mientras llega el nuevo prelado) el que ha canalizado un operativo que ya cierra los últimos flecos para que todo salga a la perfección el próximo sábado. Alojamiento, catering, protocolo y la propia ceremonia son algunas de las áreas en las que trabajan en estos días y en las que están trabajando miembros del Colegio, como José María Bravo. Y es que el hotel Senator alojará a la mayor parte de los 20 obispos que concelebrarán en la misa. Vendrán de Andalucía y Madrid, las provincias eclesiásticas de Ceballos y Zornoza, respectivamente. A ellos se sumarán los familiares de ambos obispos, a los que la Diócesis les proporcionará alojamiento y los 55 seminaristas de Getafe que serán alojados en el Colegio San Felipe.
Se estima que llegarán a partir del viernes unos 35 sacerdotes de la misma Diócesis que se buscarán el alojamiento por su cuenta y un número por determinar de jóvenes de la misma zona. De ello y de un catering que dará de comer a unas 190 personas en el Seminario de San Bartolomé (entre sacerdotes, seminaristas y familiares de ambos obispos) se encarga el sacerdote Balbino Reguera. El director diocesano del clero espera «que todo esté a la altura de la Diócesis».
Un «gran acto»
Un sentimiento que comparte el maestro de ceremonias de la Catedral, Rafael Vez. Él se está encargando de un acto que se está cuidado al milímetro. Entre los asistentes más destacados estará Renzo Fratini, nuncio apostólico en España que será el encargado de realizar una semblanza del nuevo obispo. Justo antes, Ceballos le presentará al nuevo obispo la Diócesis que está a punto de dirigir.
Antes de que arranque la misa, el Colegio de Consultores recogerá en la Residencia Sacerdotal (y del obispo) al prelado electo que se revestirá en el Seminario de San Bartolomé. Desde allí, se trasladará a la Catedral, donde será recibido por los Cabildos Catedralicios de Cádiz y Ceuta. Zornoza accederá a la Catedral, pasará por las puertas del trascoro y se sentará en su sede a orar. Justo después arrancará una celebración que incluirá la lectura y comprobación de las letras apostólicas del papa, en las que se comunica el nombramiento del nuevo obispo. Virelay se encargará de la parte musical (interpretará la Misa de Angelis para un nuevo obispo especialmente interesado en la música) y la Catedral estará dividida por zonas para acoger a instituciones, sacerdotes y religiosos (de la Diócesis de Cádiz serán 160) en una ceremonia «en la que solo el 30% del aforo estará reservado, el resto será de acceso libre», como puntualiza Bravo. Estos gaditanos podrán acceder al templo por las puertas laterales de la fachada, la principal quedará reservada para el obispo. Detalles de un momento único que no se vive en la ciudad desde hace 18 años y se repetirá dentro de tres días en una Catedral de corta trayectoria que grabará la jornada del sábado en una nueva página de su breve historia.