Ingresa en prisión el joven acusado de asesinar a un anciano en Alcalá

El juez de guardia de Chiclana ordenó ayer el ingreso en prisión preventiva sin fianza para el joven de 23 años que fue detenido como el presunto autor de la muerte a golpes de un anciano de 80 años, vecino suyo en la localidad de Alcalá de los Gazules.

Habían pasado unos minutos de las diez de la mañana, cuando el supuesto homicida (A.C.M., de 23 años de edad) fue conducido desde los calabozos del cuartel de Barbate -adonde fue trasladado tras su detención el pasado martes- hasta los juzgados de Chiclana, en la plaza del Retortillo, donde debía declarar ante el juez de guardia.

Cuando el joven vio que varias cámaras y periodistas le esperaban en las puertas del parking subterráneo que da acceso a los vehículos de los detenidos, trató de ocultar su rostro. Durante varias horas, permaneció en el interior del Palacio de Justicia, hasta que el juez ordenó finalmente su ingreso en prisión sin fianza.

La Guardia Civil lo detuvo el pasado martes, apenas dos días después de que encontraran al anciano tumbado en plena calle y con varios golpes en la cabeza y en el rostro que supuestamente le causaron la muerte.

Según recordó ayer la Guardia Civil en un comunicado, los hechos tuvieron lugar sobre las 6.40 de la mañana del domingo 9 de octubre, cuando el fallecido (Rodrigo Pérez García), vecino de Alcalá de los Gazules, se dirigía a tomar café en un bar de la localidad.

Atacado sin mediar palabra

El hombre fue agredido por la espalda, supuestamente por A. C. M, que le golpeó presuntamente en la cabeza con extrema violencia, con un palo de grandes dimensiones. Según declaró el detenido poco después a los agentes de la Benemérita, su intención solo era quitarle la cartera, no matarlo, pero al parecer ni siquiera se la exigió. Al anciano no le dio tiempo ni siquiera a negarse. Le atacó supuestamente.

El anciano no murió al instante. Fue asistido en un centro de salud de la localidad alcalaína, desde donde fue trasladado en ambulancia al hospital de Puerto Real, pero no sobrevivió. Falleció cinco horas después -a las 11.15 horas- a causa de los golpes.

Dado que había recibido violentos golpes, la Guardia Civil sospechó de inmediato con la posibilidad de que el anciano fuera agredido, no que sufriera caída. Así lo confirmó la autopsia del cadáver, realizada en la mañana del lunes en el Instituto de Medicina Legal de Cádiz. La muerte se produjo por las lesiones que presentaba la víctima en la cabeza y la cara, concluyeron los forenses.

Los agentes comenzaron sus pesquisas, primero, interrogando a las personas que encontraron malherido a la víctima de la agresión. Uno de ellos era el joven ahora detenido, que manifestó en su declaración de los hechos numerosas contradicciones que hicieron sospechar a los agentes que pudiera estar relacionado con la muerte. En un segundo interrogatorio, el joven se derrumbó y reconoció la autoría de los hechos. En su domicilio, los agentes recuperaron la cartera de la víctima.