La alerta naranja por fuertes vientos solo trastoca el servicio de catamaranes

La alerta naranja que se activó ayer en la provincia por fuertes vientos no dejó las serias consecuencias de otras ocasiones. Los bomberos del Consorcio Provincial efectuaron apenas quince salidas por desprendimientos o saneados de fachadas. La actuación más destacada la realizó el parque de Cádiz, que tuvo que retirar una rama de árbol que cayó sobre un coche estacionado junto al Instituto Hidrográfico. La mayoría de las intervenciones tenían como objetivo quitar elementos peligrosos que podían caer en la vía pública y ocasionar un accidente.

Los mayores inconvenientes se registraron en los transportes, ya que el servicio de catamaranes que conecta Cádiz con Rota quedó suspendido. Sus usuarios se vieron obligados a recurrir a transportes alternativos debido a rachas de viento que alcanzaron los 80 km/h. La situación fue amainando por la tarde. Así la Agencia Estatal de Meteorología rebajaba al cierre de esta edición la alerta al nivel amarillo (riesgo) para toda la provincia, a excepción del área del Estrecho, donde se sigue manteniendo el aviso por riesgo importante (nivel naranja). La previsión vuelve a apuntar a fuertes vientos y oleaje en el litoral.

Otras tres provincias andaluzas estarán también en alerta amarilla. Se trata de Granada, Málaga y Almería.