Siete testigos declaran sobre la muerte de María Esther en Arriate
MÁLAGA. Actualizado: GuardarSiete personas, entre las que se encuentra al menos un menor, declararon ayer en la Fiscalía de Menores de Málaga como testigos en relación con la muerte de la niña de 13 años María Esther Jiménez Villegas, natural de Paterna, que fue asesinada a finales de enero en el municipio malagueño de Arriate, donde vivía con sus padres.
Cabe recordar que un menor de 17 años del mismo municipio fue detenido como el supuesto autor del crimen apenas dos semanas después de que se encontrara el cadáver de la menor con un golpe en la cabeza, en la caseta de una depuradora en las afueras la localidad. La abogada de la familia de la víctima, Bárbara Royo, explicó ayer a los periodistas que el contenido de las declaraciones ha girado en torno a lo que los testigos saben sobre lo ocurrido durante las horas previas o posteriores a la muerte de María Esther. Ha precisado, sin embargo, que las explicaciones de los testigos no han sido «esclarecedoras» para el caso, pero servirán de apoyo a las pruebas biológicas. Los investigadores hallaron restos que podrían ser de sangre en una zapatilla deportiva en el transcurso del registro domiciliario efectuado en la casa del acusado, aunque las pruebas de ADN practicadas sí coincidieron con el arrestado.
El juez ordenó el internamiento del menor en régimen cerrado durante seis meses, el máximo que establece la ley, aunque podría prorrogarse por otros tres si se considera conveniente.