El Cuco es absuelto del asesinato de Marta del Castillo

«Dolor, rabia, impotencia y decepción» . Con estas palabras, Antonio del Castillo y Eva Casanueva, los padres de la joven sevillana Marta asesinada en enero de 2009 ycuyo cuerpo aún no ha aparecido, se pronunciaron sobre la sentencia que absuelve al menor Javier G., conocido por 'el Cuco', de haberla asesinado y violado. El juez condena al menor, que ahora tiene 16 años, a dos años y once meses de internamiento y a otros dos de libertad vigilada por encubrimiento del crimen. En la sentencia el juez de menores, Alejandro Vián, se muestra seguro de que el Cuco conoce el paradero del cuerpo de Marta, pues ayudó a su traslado. Según su abogado, Fernando de Pablo, el menor podría quedar en libertad en meses si se le descuenta el tiempo que lleva en un piso tutelado. Con anterioridad estuvo nueve meses internado.

Tanto la Fiscalía como la acusación particular ejercida por los padres de Marta se mostraron decepcionados con la sentencia y anunciaron el recurso de la misma. Fiscalía y acusación pidieron para el Cuco seis años de internamiento por violación y asesinato, la máxima condena según la ley penal del Menor. La fiscal jefe de Sevilla, María José Segarra, admitió a los periodistas que la sentencia ha sido «una decepción» y que no la esperaban.

Los padres fueron más duros. Ambos comparecieron ante los medios en las cercanías de su casa en Sevilla, en la ya famosa calle Argantonio. «Lo único que podemos esperar es la justicia carcelaria», dijo visiblemente dolida Eva Casanova. La madre de Marta expresó sin tapujos su falta de fe en la justicia. «Matar sale muy barato en España», dijo para añadir que el sistema estaba creando una escuela de delincuentes. Su marido enfatizó: «La Justicia está creada para los delincuentes. Somos garantistas, pero solo para los delincuentes».

En la sentencia, el juez de menores da por ciertos algunos hechos ya conocidos sobre lo que ocurrió la noche del 24 de enero de 2009 cuando Marta desapareció. El magistrado confirma que el cuerpo de Marta fue sacado con la ayuda del menor del piso en la calle León XIII, donde vivía el autor confeso del crimen, Miguel Carcaño, en una silla de ruedas y que en el coche de la madre de el Cuco lo trasladaron al lugar que lo hicieron desaparecer.

Venganza o resentimiento

Sin embargo, para el magistrado, no ha quedado debidamente acreditado que el menor violara a Marta, ni que ayudara a Miguel a hacerlo ni que participara en la muerte de la menor, como sostiene la acusación. El magistrado refuta las pruebas genéticas halladas en el dormitorio de Carcaño con el argumento de que pudieron producirse cuando el menor participó en el traslado del cuerpo y tampoco considera válida la huella en una botella de ron pues pudo registrarse otro día distinto al del crimen.

El juez hace una crítica a la fiscalía por basar su principal prueba en el testimonio del asesino confeso cuando en su declaración no estuvo presente el abogado del menor. Vién cree que Carcaño acusó al menor por «venganza o resentimiento» porque el día anterior había implicado a su hermano en el traslado del cadáver.

Alejandro Vién sí manifiesta en la sentencia su «plena convicción» de que el Cuco conoce a donde fue llevado el cuerpo de Marta, reprochando al joven que no atendiera su «obligación moral» con la familia de Marta y con la sociedad de revelar el paradero del cuerpo.

La Audiencia de Sevilla confirmó ayer el procesamiento del asesino confeso de la joven sevillana, Miguel Carcaño, y los otros tres acusados mayores de edad, su hermano Francisco Javier Delgado, la novia de este María García y su amigo Samuel Benítez. Los cuatro procesados serán juzgados en los próximos meses.