
Casi 360 plazas concertadas en geriátricos están desiertas por el atasco administrativo
Pertenecen a cinco nuevas residencias que recibieron hace tiempo la licencia de apertura y están a la espera del convenio con la Junta
CÁDIZ. Actualizado: GuardarEl papeleo es lo que tiene, sea para lo que sea siempre toca esperar. No es cuestión de administraciones, tiene más que ver con el momento o con el funcionario de turno y dependiendo de eso puede tardar una semana o un año. En los últimos meses parece que todo tiende a dilatarse aún más. Ese mismo es el caso de los conciertos de plazas en residencias de ancianos.
A pesar de la urgencia y de la lista de espera, la burocracia sigue su curso y deja escenas en la provincia tan curiosas como la que vive la residencia del mercado que gestiona la firma Reifs en Chiclana. Abrió sus puertas el pasado abril y desde entonces ya presta servicio a los usuarios que pagan de forma privada sus cuotas. Son poco más de una veintena, las cien restantes -perfectamente acondicionadas y listas para su apertura- siguen a la espera de la firma del convenio con la Junta. El trámite aún puede dilatarse uno o dos meses más, según el último anuncio que hizo la empresa.
Junto con las del geriátrico chiclanero hay en total 360 plazas en la provincia en edificios perfectamente terminados y acondicionados a la espera de la respuesta de la Consejería. Esta ampliación viene a reforzar la red asistencial de la provincia que poco a poco se pone al día. Desde que entró en vigor la Ley de Dependencia, Cádiz ha tenido que someterse a un rápido aprovisionamiento de recursos. Partía de una posición mucho más atrasada que otras provincias y la prestación de plazas residenciales se convirtió en la más difícil de satisfacer.
Otro de los proyectos que ha creado más expectativas es el que promueve la Fundación Conil Solidario en la localidad. El geriátrico lo gestiona la empresa Geron y ofrece una respuesta a los usuarios que necesitan más atención como los enfermos de alzhéimer. Cuenta con 90 plazas y la mitad de ellas se dedicarán a este tipo de pacientes. Fuentes de la fundación gestora aseguran que ya cuentan con la licencia de apertura y todo el mobiliario y el material a punto, «podría abrir de forma privada, pero esa no es la intención», explican.
El último trámite será la conclusión del concierto y su posterior ocupación, pero para eso aún se necesitarán un par de meses, según la planificación de la empresa. Otra cosa será la que tenga prevista la Junta. En la misma situación se encuentra el centro de San Juan de Dios en Cádiz, que acaba de salir de un duro problema de conflictividad laboral. Acaba de pasar a manos de Geron y se ha conseguido llegar a un acuerdo con los trabajadores, hasta ahora a cargo del Obispado. En este caso será más de un centenar de plazas en pleno centro de la capital. Pero aún no hay una respuesta oficial para la culminación de la tramitación.
Coordinadores de centros de la empresa explican que «si los documentos no presentan ningún defecto, no hay que temer retrasos, pero cualquier fallo supone triplicar los plazos». La empresa confía en que el proceso abierto para el Convento de Santo Domingo, también en Cádiz, disponga de todas las garantías para evitar retrasos. En este caso serán 46 plazas.
Sin fecha y sin perspectivas hay un buen número de centros, con los que ya cuenta la administración para ampliar la red, que aún están en fase de proyecto. Uno de los más esperados es el de Chipiona, que se planteó hace ya más de un año y aún está a la espera de una solución. Las últimas noticias son que el Ayuntamiento quiere llegar a un acuerdo con la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer para crear uno específico, pero aún no se ha encontrado la fórmula para resolver el problema de la financiación.
También había iniciativas en Rota, donde el cartel que anuncia el futuro geriátrico sigue criando moho. Y en Sanlúcar también se planteó la posibilidad de un nuevo equipamiento, incluso salió en defensa del proyecto una asociación que recauda dinero para levantarlo.
Mejor perspectiva tiene el planteado en Alcalá de los Gazules, que ya está en obras. El de Vejer aún sigue siendo un proyecto, como el municipal de Benalup.