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Hipotels prevé otro hotel en la Costa de la Luz en año y medio
El presidente de la cadena hotelera, Juan Llull, busca un lugar donde «no haya problemas urbanísticos ni oposición de vecinos»
CÁDIZ. Actualizado: GuardarAyer fue la presentación oficial de un proyecto que está a medio camino de ser una realidad, el nuevo alojamiento que Hipotels tendrán en Conil, en la playa de La Fontanilla. La nueva infraestructura se llamará Gran Conil. Durante el acto simbólico de la puesta de la primera piedra (aunque ya las obras están bastante avanzadas), el empresario mallorquín explicó que está dispuesto a invertir en el plazo de año y medio en otro hotel en la costa gaditana, «aunque estamos mirándolo todo muy tranquilamente. No me gustan la prisas».
La vinculación de Llull con esta parte de la Costa de la Luz se remonta a la creación de Novo Sancti Petri, donde su firma tiene cinco alojamientos de cuatro y cinco estrellas. En Conil también cuenta con el emblemático Hotel Flamenco, una instalación que compró y remodeló recientemente. Para Juan Llull esta provincia tiene aún mucho encanto que explotar, «y mis futuras inversiones cuentan con el apoyo de los touroperadores, a quienes consulto antes de emprender cualquier proyecto. Y todos ( entre los que destacan los alemanes TUI o Neckermann), me dicen que esta zona es muy buena». Pero este emprendedor pone una condición muy clara a sus inversiones: «que no haya problemas urbanísticos ni oposición de los vecinos». A su edad (75 años), con un grupo empresarial bien consolidado, declara no tener necesidad de enfrascarse en disputas, ni de perder el tiempo.
Hace unos meses, Hipotels abandonó el proyecto de Trafalgar precisamente por los vaivenes que ha dado el planteamiento barbateño. En la cota de Vejer, en El Palmar, también hay conflictos vecinales y oposición al proyecto urbanístico. Así que todo apunta a que la cadena mallorquina volverá a poner sus ojos en las parcelas turísticas que quedan sin vender en Conil, en el entorno de La Fontanilla, donde ahora se levanta el Gran Conil. Pero el arquitecto del grupo, y responsable del edificio en construcción, Antonio Fernández Sáenz, no quiso desvelar más. No interesa para el negocio dar demasiados detalles.
Pero no deja de ser muy buen síntoma que la cadena hotelera apuesta por la costa de Cádiz en plena crisis económica. El empresario lo achaca a la confianza que tienen en sus proyectos los bancos, «que siempre me adelantan el dinero», y a la voluntad de los políticos de la zona. «Llegué aquí de la mano de José Mier (ex alcalde de Chiclana) y sigo aquí por mi amistad con él, y por el buen trabajo del consejero de Turismo, Luciano Alonso, y por el técnico de la Junta, Rodrigo Valdecantos». Esta predisposición política y el respaldo de los touroperadores a esta provincia ha hecho que la firma Hipotels desista de sus planes de expansión en México para invertir en La Costa de la Luz.
En la presentación del nuevo hotel, que se celebró ayer a pie de obra, estuvo una completa representación de los políticos locales, provinciales y andaluces. El consejero de Turismo de la Junta, Luciano Alonso, subrayó la labor empresarial de Llull argumentando que la marca 'Andalucía' goza de muy buena salud «y lo comprobamos ahora con la confianza que tiene este magnífico empresario en Cádiz». El alcalde de Conil, Antonio Roldán, aseguró que «esto sí que es un brote verde, la construcción de un hotel que está generando mucho empleo en nuestro pueblo» y destacó que la inmensa mayoría de los trabajadores que levantan el hotel son del pueblo. «Todo se ha contratado aquí y esto está dando mucho trabajo, en estos tiempos tan difíciles», según Roldán.
Tampoco faltaron al encuentro con el empresario, que visita muy de tarde en tarde la zona, el delegado provincial de Turismo de la Junta, Manuel González Piñero; la diputada de Turismo, Irene Canca; el delegado de Zona Franca, José Mier y el presidente de Horeca, Antonio de María; entre otros muchos.
El empresario estuvo respaldado por buena parte de su equipo directivo, con José Ruiz a la cabeza; el arquitecto del edificio en construcción, Antonio Fernández y su hija, María Antonia Llull.