Obama se pone a la altura de Gasol

El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, organizó con motivo de su 49 cumpleaños un partido de ensueño con muchas de las estrellas de la NBA en activo y también retirados para que juntos ofreciesen un espectáculo a los soldados heridos que llegan desde los conflictos bélicos en Iraq y Afganistán. Durante dos horas, el presidente Obama estuvo jugando con las leyendas de la NBA en un mítico y sorprendente encuentro de basket.

Entre los ases que acudieron a la llamada del inquilino de la Casa Blanca estuvo Pau Gasol, a quien ya le elogió en su día catalogándole como el mejor pívot de la competición. Obama y Gasol compartieron escenario, y se rodearon de auténticos mitos del baloncesto.

En ese encuentro también estuvieron LeBron James y su nuevo compañero de equipo, los Heat de Miami, el escolta Dwyane Wade. Parece que ahora ya no hay quien les separe.

A ellos a su vez se les unió el alero Carmelo Anthony, amigo de ambos jugadores, junto a otras figuras de la NBA, a las que acompañaron leyendas como Bill Russell y Magic Johnson, ambos miembros destacados dentro del Salón de la Fama y que tampoco quisieron perderse el duelo.

Además, el presidente estadounidense también invitó para el partido a Maya Moore, del equipo femenino de los Huskies de la Universidad de Connecticut y que no se perdió la cita.

Obama, que cumplía 49 años, permaneció dos horas dentro del gimnasio donde se disputó el partido. No permitió a los periodistas su acceso y el argumento que dio luego el Secretario de Prensa de la Casa Blanca, Robert Gibbs, fue que el presidente quería «simplemente» jugar.

Su decisión de hacerlo a «puerta cerrada» no permitió que los periodistas diesen a conocer al mundo sus cualidades atléticas, aciertos y problemas a la hora de enfrentarse a las grandes estrellas de la NBA. Tampoco cuál fue el resultado final del partido amistoso. Pero tendría que sudar el presidente para ponerse a la altura de Pau.