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La Fiscalía alerta de un aumento «alarmante» de los delitos tecnológicos

Por primera vez en su memoria anual, señala a este tipo de delincuencia como una de sus preocupaciones

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Imagínese que a un delincuente o un criminal en ciernes se le ofrece la posibilidad de cometer sus fechorías garantizándole grandes dosis de anonimato, escaso riesgo de ser apresado en plena acción y aportándole una red ilimitada donde ocultarse tras nombres ficticios o 'nicks' de imposible identificación. Además, si es habilidoso con las nuevas tecnologías, podría escurrirse como pez vivo en un nuevo escenario, al que la legislación española está aún construyendo sus límites. Si cae en manos policiales, es muy posible que se enfrente a una pena menor. Ésta y otras tanta circunstancias han hecho que la delincuencia salte al mundo virtual; que los primeros hechos aislados sean un recuerdo y la incidencia, cada vez mayor, se haya convertido en una preocupación judicial y policial. La Fiscalía de Cádiz, por primera vez, incluye entre sus principales frentes de batalla los delitos tecnológicos, aquellos que se cometen o se valen de Internet. Y así lo expresa en su resumen de la actividad de 2009, donde ha detectado un aumento «alarmante» de este tipo de hechos.

Aunque el narcotráfico sigue acaparando gran parte de las investigaciones que realiza el Ministerio Público, las estafas, acosos, amenazas o infracciones contra el honor que se cometen desde un teclado y una pantalla de ordenador están creciendo y sólo en 2009, como indica la memoria de la Fiscalía Superior de Andalucía, la Policía Nacional esclareció 89 casos; mientras que la Guardia Civil hacía lo propio con otros 41 asuntos que nacieron y se ejecutaron en la Red. 130 investigaciones en las que se destaparon organizaciones con contactos internacionales, «que suelen dar lugar a otros delitos de blanqueo o de receptación, ejecutados también a través de medios tecnológicos y en la mayoría de ocasiones con la colaboración imprudente» de ciudadanos.

Falsas ofertas de trabajo

Son los conocidos 'muleros', supuestos ingenuos internautas que responden a extrañas ofertas de trabajo que consisten en permitir la entrada de dinero en su cuenta bancaria, aunque desconozcan el origen, para después transferirlo en una suerte de laberinto financiero «que dificulta el poder seguir la pista a los delincuentes originarios». La recomendación del fiscal es indagar en la implicación de esos 'muleros' y sólo proceder al archivo de la causa cuando quede acreditado su total desconocimiento.

El ciber-acoso ha tenido en la provincia un duro ejemplo en Chiclana. El ahora imputado logró ganarse la confianza de una adolescente a la que terminó chantajeando con difundir conversaciones y material íntimo suyo si no accedía a tener una cita. El encuentro acabó en violación. Este tipo de delitos tiene su campo de abono en las redes sociales, donde la falta de desconfianza de muchos jóvenes los convierten en víctimas propicias. Los acosadores que acechan bajo identidades falsas, no sólo incurren en agresiones sexuales cuando consuman sus intenciones, «sino también en delitos como las amenazas o las coacciones».

Pese a que en la provincia se han descubierto varios casos similares a lo largo de 2009, «la principal figura delictiva en la provincia» es la posesión y distribución de pornografía infantil. Las constantes detenciones de vecinos en operaciones nacionales dan fe de ello. Pero como también reconoce el fiscal, estos arrestos no se traducen en penas elevadas, sino en todo lo contrario; lo cual no favorece a frenar el consumo de este tipo de material ilícito.

No es el único impedimento de la lucha contra el fenómeno delictivo en Internet. Lo novedoso de la materia o el miedo, temor o vergüenza de la víctima a denunciar abocan al archivo de muchos de los casos.

Más droga

Pese a que la última memoria de la Fiscalía de Cádiz se detiene, como gran novedad, en este tipo de conductas, también hace un repaso al problema crónico del narcotráfico en la provincia, cuyas cifras hablan por si solas: 178 toneladas de hachís incautadas; si bien destaca el aumento de la cocaína intervenida (1.119 kilos); 3.028 asuntos por delitos contra la salud pública iniciados en una demarcación, que concentró entre 2004 y 2009 el 16% de las investigaciones iniciadas en todo el país. Y es que una quinta parte del hachís sacado del mercado en España, entre 2000 y 2008, fue localizado en esta provincia.