ASÍ NO LLEGAMOS

Por lo que estamos viendo los técnicos que se empeñan en mejorar nuestra ciudad para el doce no dan una. Primero fue lo de la plaza del Mar, desde que se conoció el proyecto comenzaron a salir objeciones de todos colores, opiniones encontradas por todos los políticos y al final va a quedar, si Dios no lo remedia, en una simple ampliación del aparcamiento subterráneo de Canalejas. La denostada verja quedará donde siempre, separando la ciudad del mar y pare usted de contar.

Después, y dentro del proyecto de remodelación de la plaza de Sevilla que pretendía ser el pórtico de entrada desde el nuevo puente a la ciudad, surgió lo de la Aduana. No sin gran polémica, y enfrentamientos de todo tipo, hubo que cambiar el proyecto. Hasta el momento, solo ha quedado en eso, en un proyecto que ni ha comenzado a elaborarse. No sabemos muy bien como quedará al final ni, lo que es peor, cuando comenzará a ejecutarse.

También surgió la problemática sobre el entronque del puente con la barriada de La Paz. Hasta que se fue la ministra todo fueron polémicas y dimes y diretes entre unos y otros. Ahora, que ya estamos viendo casi los tableros colocados, la rotonda no se ha comenzado elaborar, tampoco tenemos claro como quedará el nuevo acceso a la ciudad ni si el tranvía llegará hasta San Juan de Dios o a la plaza de España ni si dará la vuelta a Cádiz o si habrá otro alternativo, no sabemos nada. Se comenzó, o al menos eso dijeron, la remodelación del adoquinado que circunda a la ciudad. Tras una obra larga, larga, de doscientos metros en los que se emplearon varios meses, se optó por esos carrilitos de asfalto que después de un par de meses de uso están que dan pena, otro fiasco. Así, no llegamos