MUNDO

Un niño holandés, único superviviente en un accidente de avión en Libia

RABAT. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Un 'niño milagro' de apenas 10 años ha sido el único superviviente de la catástrofe aérea en la que ayer murieron 103 personas en Trípoli, la mayor parte de ellas europeas. Aún no se conocen las causas por las que el Airbus A330-200 de la compañía libia Afriqiya, que procedía de Johannesburgo, se estrelló al intentar aterrizar en el aeropuerto de la capital del país norteafricano.

El ministro de Transportes libio, Mohamed Zidan, aseguró que se habían recuperado 96 cadáveres, e identificó al pequeño superviviente como un «niño holandés», país al que pertenecen 61 de las víctimas mortales. Sin embargo, las autoridades neerlandesas no habían podido confirmar ni la nacionalidad ni la edad del muchacho y tampoco si se trataba de un niño o una niña. El pequeño sufrió varias fracturas de las que fue intervenido en el hospital Al Jadra de Trípoli y se encuentra estable ya que no tiene ningún órgano vital afectado, según aseguró un médico a las cámaras de la televisión libia. El diario holandés 'Telegraaf' publicó en su edición web que el pequeño viajaba con sus padres y un hermano.

Los pasajeros procedían de Holanda, Sudáfrica, Reino Unido, Alemania, Francia y Libia, según confirmó el ministro Zidan. Un trabajador de Afriqiyah Airways aseguró que en el avión siniestrado también viajaban al menos un nacional de Zimbabue y un filipino. Los once miembros de la tripulación eran todos libios.

Holanda se encontraba en estado de 'shock' tras la peor tragedia aérea que sufren sus ciudadanos. «Hemos recibido un triste mensaje», señaló el primer ministro neerlandés, Jan Peter Balkenenden, mientras que el presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, se refirió al pequeño superviviente como «un auténtico milagro». El líder libio, Muamar Gadafi, no se pronunció públicamente sobre la catástrofe.

Los equipos de rescate hallaron por la mañana las dos cajas negras del avión, que ayudarán a aclarar las circunstancias del accidente.