Román es, desde ayer, el candidato oficioso a la Alcaldía por el PSOE

Minutos antes de que Rafa Nadal levantara su sexto trofeo consecutivo en Montecarlo, el actual alcalde de Chiclana, José María Román, ganaba su primer 'matchball' particular. Sin ningún género de dudas, el dirigente socialista salió ayer más que reforzado de la Fiesta de la Primavera que su partido celebró en El Sotillo, y a la que acudieron destacados dirigentes del PSOE a nivel provincial y regional.

Las alocuciones de Manuel Chaves, Rosa Torres, Luis Pizarro o Francisco González Cabaña sirvieron para atacar al Partido Popular, para hablar de la incipiente recuperación económica del país, y para recordar el presunto caso de corrupción de la trama Gürtel.

Sin embargo, en la primera fila de autoridades había alguien henchido de orgullo, en silencio, tras recibir el respaldo que necesitaba, -y pedía-, de su dirección.

Tras perder la mayoría absoluta en las últimas elecciones de 2007, José María Román no las tenía todas consigo. Supo soportar la travesía en el desierto que supusieron para el PSOE los 17 meses de Gobierno cuatripartito desde la oposición, y hace casi año y medio recuperó la Alcaldía mediante una moción de censura.

Desde entonces los rumores sobre su continuidad al frente del barco socialista han sido muchos y muy variados. Incluso estuvo seriamente cuestionado. Hasta ayer. El primero en brindarle todo su apoyo de forma oficiosa como alcaldable del PSOE a las municipales de 2011 fue el Secretario Provincial. González Cabaña refrendó «el buen trabajo» que se está haciendo en Chiclana, y aunque reconoció que no le gusta saltarse «los procedimientos» del partido, dejó entrever que Román será su cabeza de lista.

Guerra de candidatos

A continuación, el Consejero de Gobernación de la Junta, Luis Pizarro, fue incluso más lejos, y pidió «a los compañeros socialistas de Chiclana que recuerden la experiencia vivida en las últimas elecciones y se movilicen». Además, Pizarro pidió a la asamblea de militantes que deberán elegir candidato en la localidad, «que se acuerden del buen trabajo de Román», en lo que pareció más una recomendación interna que un consejo.

Con este respaldo inesperado a Román que aclara el futuro de la fuerza política más votada en Chiclana, la Fiesta de la Primavera socialista continuó entre vítores a los primeros espadas que intervinieron. Con menor afluencia de simpatizantes que en años anteriores, la maquinaria socialista ya calienta motores. En el PSOE se presume de saber elegir candidato; «No somos como el PP, donde parece que se sientan Arenas, Sanz y Loaiza en una terraza y le echan el lazo al primero que pasa por allí para ser candidato, como ha ocurrido con Antonio Moreno en San Fernando», sentenció Cabaña.