Un grupo de músicos toca, junto a unos 'sin techo', frente a una oficina del Banco Emporiki en el centro de Atenas. :: AFP
Economia

Europa prepara una profunda reforma de la Unión Monetaria

Contempla la creación de un fondo económico para intervenir en crisis como la griega, con la contrapartida de mayor rigor en las cuentas

BRUSELAS. Actualizado: Guardar
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La Unión Europea está preparando una reforma mayor de la Unión Económica y Monetaria (UEM), a fin de evitar la repetición de crisis como la griega. La reforma contempla la creación de un Fondo Monetario Europeo «que actuaría con poderes equivalentes de intervención a los del Fondo Monetario Internacional», según ha manifestado este fin de semana el ministro germano de Finanzas, Wolfgang Schauble, al semanario alemán Welt am Sonntag.

El economista jefe del Banco Central Europeo, Jurgen Stark, segundo en la institución tras Jean-Claude Trichet, afirmó ayer, en unas declaraciones publicadas por el diario alemán 'Handesblatt', que la idea de ese fondo «no le gusta» porque «crearía un estímulo falso y dañaría a los países con finanzas públicas sólidas».

Un Fondo Monetario Europeo «minaría la aceptación pública del euro y de la propia Unión Europea», declaró en alusión a la moneda única, el gran logro de los principales socios comunitarios.

Guste la idea o no a Stark, y a todo lo que representa, lo cierto es que las afirmaciones de Schauble, apoyadas por la canciller Merkel y a Nicolás Sarkozy, fueron ayer ratificadas por Amadeu Altafaj, portavoz del comisario Olli Rehn, responsable de Economía y Asuntos Monetarios. Según él, la Comisión Europea «está dispuesta a plantear esta iniciativa» a los 27. El funcionamiento del Fondo «estaría sometido a una rigurosa condicionalidad» y su creación correría pareja a un «refuerzo de la coordinación de la política económica y la vigilancia multilateral» en el seno de la UE.

«Prematuro»

El portavoz estimaba «prematura» cualquier especulación acerca de si la puesta en marcha de todos estos mecanismos requerirá una reforma de los Tratados pero su creación responde «a la determinación de mejorar la gobernanza económica de la Eurozona», en el convencimiento de que situaciones como la griega «no deben repetirse».

El lunes próximo, el Eurogrupo tiene previsto analizar el primer balance de actuaciones que ha elaborado el Gobierno griego, a la luz de lo establecido por el Ecofin el mes pasado, en aplicación de las provisiones del artículo 121 del tratado, por el que la economía griega quedó bajo la tutela comunitaria.

El Eurogrupo tiene también previsto analizar las últimas informaciones recabadas sobre la práctica de camuflar situaciones reales de deudas nacionales mediante técnicas sofisticadas de ingeniería financiera, como los CDS (Credit Default Swaps) integrados en el opaco mercado de los derivados. Creados en 1990, los CDS totabilizaban 55.000 millones de dólares en septiembre de 2008, antes de que la crisis cobrara toda su amplitud. Sus operadores principales son los grandes bancos y los fondos de alto riesgo (los 'hedge funds', en España bautizados con la denominación de fondos libres). Estos últimos estarán también bajo el punto de mira del Eurogrupo la semana que viene.

La reforma general de la operativa europea ante las crisis del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, como ha sido el caso de Grecia, ha llevado su tiempo. A ella se refirió elípticamente la vicepresidenta del Gobierno, Elena Salgado, cuando manifestó en las Cortes que España participaba de los mecanismos que se estaban poniendo a punto para hacer frente a este tipo de situaciones. En los estadios previos al lanzamiento de esta reforma mayor de la Unión Monetaria, la presidencia española de la UE no parece estar desempeñando papel alguno y sí Alemania y Francia, además de Jean-Claude Juncker en tanto que presidente del Eurogrupo.

Mientras tanto, en Grecia prosigue la protesta social contra los 'sacrificios' dispuestos por el Gobierno socialista. Inspectores fiscales, los empleados municipales y los recolectores de basura tomaban el relevo ayer con nuevas protestas contra las medidas de ajuste decididas por el gobierno socialista, de cara a una gran huelga prevista el jueves por las centrales sindicales.

Cerca de 15.000 agentes fiscales emprendieron una huelga de 48 horas. Los trabajadores municipales también se declararon en paro hasta el miércoles «para manifestar la oposición de los trabajadores de las administraciones locales a las injustas medidas sociales y el saqueo de los ingresos de los asalariados y los jubilados». Igualmente, los empleados de limpiezas públicas también cesaron de trabajar, y los empleados judiciales mantienen una huelga de tres horas diarias esta semana.