La crecida del Guadalquivir obliga a desalojos en Jaén, Córdoba y Sevilla
El desembalse conjunto de los pantanos, que acumulan niveles históricos, activa la alerta en las provincias del interior
SEVILLA. Actualizado: GuardarComo se temía, la crecida del principal río andaluz causó ayer desbordamientos puntuales en tres provincias, -los mayores problemas se registraron en Jaén-, y al menos dos centenares de desalojos preventivos en diversas localidades. Las lluvias y los desembalses en la cuenca del Guadalquivir causaron la inundación de zonas de Jaén capital, de Córdoba y de Lora del Río (Sevilla), donde se tuvo que desalojar a numerosos vecinos y obligó asimismo a la interrupción del tráfico ferroviario en la provincia jiennense.
De los 84 embalses andaluces, que acumulan 9.300 hectómetros, el mayor volumen de su historia, 70 están desembalsando, y son especialmente importantes en la cuenca del Guadalquivir, la más importante de Andalucía pues acumula el 70% de la capacidad de embalse de toda la comunidad y se encuentra al 81,7% de su aforo.
El jefe de la Oficina de Planificación de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir , Agustín Argüelles, aseguró ayer que la situación de los embalses es «normal y controlada», que «no hay ningún tipo de riesgo» y que todo estaba sucediendo «según el guión previsto».
Los mayores problemas los sufrió la provincia de Jaén. En la capital, el río Guadalbullón se desbordó en la barriada Las Infantas, donde se acumuló barro en calles, casas, naves y campos de labor. El agua llegó a las pedanías de La Isla en Andújar, donde fueron desalojados sus vecinos y uno de ellos tuvo que ser rescatado por los bomberos, mientras que en San Julián se dio aviso de desalojo ante su más que probable inundación.
También se produjeron incidencias en colegios de tres localidades, como en Navas de San Juan, donde un «pequeño tornado» se llevó parte del techo del colegio y de diversas naves industriales, además de mobiliario urbano. En Mengíbar, donde el río Guadalbullón alcanzó niveles históricos con 1.760 metros cúbicos por segundo, los alumnos del colegio tuvieron que ser ubicados en un centro de adultos y en Villargordo no pudieron asistir al instituto por el corte de la A-6000.
En el núcleo de población de la Estación Linares-Baeza tuvieron que ser desalojadas varias familias y murieron algunos de los animales por el desbordamiento del río Guadalimar.
También se produjeron desalojos en Guarromán, en la pedanía Los Palomares de Jabalquinto y en la Puerta de Segura.
Además, las lluvias originaron el corte ferroviario en varios puntos de la red en la provincia de Jaén, entre las estaciones de Espeluy y Jaén, y entre Andújar y Arjonilla, lo que obligó a suspender la circulación de la línea Córdoba-Linares.
El primero de los tramos afectó a todos los trenes con salida-llegada a Jaén y el segundo exclusivamente a los que comunican Jaén con Córdoba y Sevilla. En Sevilla, 50 viviendas de Lora del Río fueron desalojadas de forma preventiva, y se ha cortó al tráfico la carretera A-474 entre las localidades de Bormujos y Bollullos de la Mitación por el derrumbe parcial de un puente.
Segundas residencias
En Córdoba, unas sesenta personas de Guadalvalle se vieron afectadas por la crecida del río Guadalquivir y recogían enseres de sus viviendas, inundadas debido al aumento del caudal. Fuentes del Ayuntamiento de Córdoba informaron a Efe de que no se podía concretar el número de personas que realmente estaban siendo desalojadas, pues existía la posibilidad de que algunas de estas casas sean segundas residencias.
Las intensas precipitaciones motivaron también que los bomberos de Córdoba tuvieran que rescatar por la mañana a una pareja y a sus ocho perros de una vivienda de Alcolea. La línea ferroviaria Bobadilla-Córdoba, entre Valchillón y el Chaparral, permaneció cerrada por las fuertes lluvias en la provincia cordobesa.