El ex dictador panameño Manuel Noriega ingresa en una prisión de París a la espera de juicio tras ser extraditado

El ex dictador panameño Manuel Antonio Noriega ha ingresado en prisión por orden de un juez francés, horas después de haber sido extraditado a Francia desde Estados Unidos. "Su detención provisional es el único medio" para garantizar que Noriega comparezca ante el tribunal que le tiene que juzgar en Francia, donde ya fue condenado en rebeldía en 1999 a diez años de cárcel, según ha explicado el juez de las Libertades y la Detención, que ha enviado al ex dictador a la prisión de La Santé, en París.

Manuel Antonio Noriega había llegado a primera hora de la mañana al aeropuerto Charles de Gaulle después de ser extraditado desde Florida. Ahora está a la espera del juicio por blanqueo de dinero. El ex militar, de 76 años, que gobernó Panamá entre 1983 y 1989, ha sido trasladado desde la cárcel de Miami donde cumplía condena desde 1992, cuando Estados Unidos le impuso 30 años de prisión por delitos de tráfico de drogas, asociación ilícita y conspiración, hasta un Boeing 747 de Air France que le ha llevado a París, donde aterrizaba a las 7.47 horas.

Noriega, que ha cumplido 17 años de cárcel en Estados Unidos por su colaboración con el cártel colombiano de Medellín, aunque decidió permanecer en prisión para evitar su extradición a Francia, fue condenado en 1999 en Francia en rebeldía a diez años de prisión. El Ministerio francés de Justicia indicaba anoche que las autoridades estadounidenses les habían notificado hace 15 días que habían dado el visto bueno a su extradición, y que desde entonces París estaba organizando su repatriación.

Una vez en la capital francesa, el ex general ha sido presentado a un fiscal que le ha notificado su orden de arresto y a continuación ha sido un juez de las Libertades y de la Detención el que se ha pronunciado sobre su ingreso en prisión provisional para su comparecencia ante el Tribunal Correccional de París. El abogado francés de Noriega, Yves Leberquier, ha considerado que su cliente no puede ser juzgado en Francia, principalmente porque los hechos que se le reprochan han prescrito. Leberquier, en una entrevista emitida por la emisora France Info, ha anunciado que va a solicitar que los tribunales franceses se declaren incompetentes y lo ha justificado tanto por "la prescripción de los hechos", que remontan a los años 80, como "la inmunidad" de la que a su juicio goza el ex general por ser antiguo jefe de Estado.

Juzgado por blanqueo de dinero

La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, firmaba ayer a primera hora la orden de extradición, según ha informado la portavoz del departamento de Estado, Andy Laine. Mientras, desde el Departamento de Justicia se ha evitado realizar ningún comentario sobre el asunto.

Noriega ya fue juzgado 'in absentia' en Francia por blanquear dinero procedente del tráfico de cocaína a través de bancos galos, y usar dicho dinero para la compra de tres apartamentos de lujo en la capital francesa. A pesar de esta condena, el ex dictador podría enfrentarse a nuevos cargos a su llegada a al estado galo. El ex dictador panameño trató de evitar su extradición apelando al Tribunal Supremo de Estados Unidos, pero esta instancia no modificó lo establecido por lo que dijo anteriormente un tribunal federal, es decir, que el Gobierno estadounidense podía extraditarle legalmente a Francia a pesar de su condición de prisionero de guerra. En este asunto el criterio de la Justicia estadounidense ha sido que las obligaciones de la Convención de Ginebra no son aplicables al caso de Noriega.

En 1988, la agencia anti-drogas de Estados Unidos (DEA, en sus siglas en inglés) acusó a Noriega, entonces aún en el poder en Panamá, de delitos de tráfico de cocaína y lavado de dinero. Para propiciar su salida del poder y poder juzgarle, el Congreso de Estados Unidos aprobó entonces sanciones contra Panamá. El ex dictador, que antes de 1988 fue un sólido aliado de Washington en Centroamérica, fue capturado en Panamá dos semanas después de que Estados Unidos invadiera el país en lo que significó la operación militar norteamericana más grande desde la guerra de Vietnam. Noriega fue trasladado a Miami para ser juzgado, donde fue considerado prisionero de guerra.