Moratinos ve un «error» fijar el fin de la misión en Afganistán sin garantizar la seguridad
Insiste en la nececidad de completar el traspaso de la gestión del país a las autoridades locales y de lograr la reconciliación de los afganos
MADRID Actualizado: GuardarEl ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ha afirmado que sería un "error" poner fecha al fin de la misión en Afganistán mientras no se garantice la estabilidad y la seguridad y no se complete el traspaso de la gestión del país a las autoridades locales. En su comparecencia ante el Congreso, Moratinos ha considerado también imprescindible lograr la reconciliación de los afganos y tratar de convencer a los talibanes moderados para que renuncien a la violencia.
El portavoz del PP, Gustavo de Arístegui, ha coincidido en que no se debe fijar un calendario de salida de las tropas españolas hasta asegurar la viabilidad del estado afgano y derrotar a los insurgentes y terroristas de Al Qaeda. De Arístegui ha reiterado el apoyo del PP a la misión española, aunque ha vuelto a lamentar que el Gobierno se escude en "eufemismos", no reconozca que en Afganistán se vive una situación de guerra y se empeñe en "edulcorar las cosas".
El más crítico con el Gobierno ha sido el diputado de IU Gaspar Llamazares, quien ha asegurado que la actual dinámica en Afganistán es de "fracaso político y militar".
Proceso de "afganización"
Según ha explicado Moratinos, las conclusiones que se adoptaron en la Conferencia de Londres del pasado 28 de enero. En este foro, la comunidad internacional acordó una nueva estrategia, que incluye la oferta de diálogo a los talibanes e ir traspasando progresivamente al Gobierno de Kabul el control del país.
A juicio del ministro, no se podrá completar el llamado proceso de "afganización" -traspaso de la gestión a las autoridades locales- "si no hay una reconciliación política a medio y largo plazo" entre los propios ciudadanos del país asiático. "Quienes se tienen que ganar el corazón de los afganos son los propios afganos", ha señalado.
Según Moratinos, este nuevo enfoque, más político que militar, es el aconsejable para lograr el éxito de la misión internacional, que comenzó en 2001 como respuesta los atentados del 11 de septiembre de Nueva York. "Ha habido un déficit civil y un superávit militar. El nuevo plan lo que hace es corregir. Antes, mezclábamos el agua y el aceite. La mezcla de Londres es la adecuada. Están mejor delimitados los pasos para lograr los objetivos", ha argumentado.
511 nuevos soldados
La nueva estrategia incluye el envío de nuevas tropas, que en el caso de España, serán 511 soldados y 40 guardias civiles para desempeñar tareas de seguridad y de formación del Ejército afgano en el marco de la operación ISAF de la ONU bajo mando de la OTAN. La medida responde la petición de ayuda que hizo el presidente de EEUU, Barack Obama, quien el pasado 1 de diciembre anunció el despliegue de 30.000 soldados más y fijó el comienzo de la retirada en junio de 2011.
Moratinos ha reconocido que la inseguridad ha aumentado en las provincias de Badghis y Herat, donde España tiene desplegadas sus tropas y ha defendido el refuerzo del contingente ante estas amenazas, aunque ha insistido en que España no es partidaria de poner fechas al final de la misión. "Antes que trabajar por una estrategia de salida, hay que cumplir con la estrategia de transición", ha opinado.
Para avanzar en el camino correcto, el titular de Exteriores ha considerado igualmente necesario que el Gobierno de Karzai se comprometa en la lucha contra la corrupción y facilite el desarrollo económico del país. Así, ha abogado por potenciar el plan agrícola para promover cultivos alternativos al opio y combatir el narcotráfico y ha destacado la conveniencia de implicar a los países vecinos a Afganistán y de crear instituciones locales a nivel provincial.