South Park y el éxito de la animación desvergonzada para niños y adultos
Aún hay gente a la que el uso repetido de palabras malsonantes les sigue haciendo gracia
Actualizado: GuardarA punto de cumplir la mayoría de edad, South Park, una de las series animadas para adultos que más tiempo llevan entre nosotros, estrena su nueva y decimoctava temporada, y pese a que actualmente el show protagonizado por Kenny, Cartman, Kyle y Stan tiene una dura competencia, siguen siendo uno de los productos favoritos de animación para adultos.
Nacidos en 1997 de la mente de Trey Parker y Matt Stones (unos creadores que se han volcado en exclusiva en estos personajes y que desde dicha fecha solo han ofrecido un producto diferente que, bajo el título “Team America”, nos mostraba marionetas al estilo Thunderbird pero con su particular humor), el show llego a España gracias a las televisiones de pago y con el tiempo empezó a emitirse en abierto y a horas intempestivas, consiguiendo, incluso de esa manera, llegar a una cantidad importante de público al que otras series animadas supuestamente para adultos, como Los Simpson, empezaban a parecerles demasiado infantiles.
Tras un éxito sorprendente que incluso dio pie a una película para cines, el show ha sufrido muchos altibajos, pero curiosamente, se ha mantenido en la palestra gracias a sus criticas mordaces y el reflejo satírico de temas actuales, principales bazas de este show cuya estética (intencionada o no) resulta de las menos atractivas dentro de la series animadas para adultos que encontramos actualmente en el mercado.
Siguiendo con su línea habitual, este año, continuaran cebándose con personalidades famosas, siendo la última de sus víctimas la cantante Lorde, una interprete que pone voz al tema musical que acompaña a “Los Juegos del Hambre: Sinsajo parte 1”
Teniendo en cuenta esa fórmula (la de utilizar la fama de otros para ganar público), y preguntándome si el show no se encuentra agotado, creo que es un buen momento para mirar al pasado, al presente y al futuro, y ver si la serie, por muy económica que resulte, sigue teniendo hueco en la parrilla televisiva, algo que, evidentemente, tampoco nos toca a nosotros decidir.
Haciendo memoria, hay que recordar que en el sector de la animación para adultos, y antes de la entrada de Padre de Familia y el boom de otras series para adultos, Los Simpson (1989), la serie de animación por excelencia para el target que hoy tratamos, ya competía en parrilla con títulos como ‘Beavis and Buthead’ (1993), ‘Vaca y pollo’ (1995) o los diferentes shows animados que la MTV creaba en exclusiva para su canal.
Si bien, ninguno de ellos, al margen del show de Matt Groening, trataba la actualidad de la forma en que la empezó a mostrarla South Park, en 1999 (año en el que también se estrenaba Futurama) la realidad fue cambiando al entrar en juego la serie de Seth MacFarlane (Padre de Familia), la cual, utilizando como base el estereotipo familiar de Los Simpson, empezaba a tocar dichos temas de una forma bastante más adulta y con una mala leche que recordaba a South Park.
A partir de ahí, entremezclando series de aspecto infantil pero que encantan a los adultos como es el caso de ‘Bob Esponja’ (1999), y explotando el funcionamiento de Padre de Familia con shows similares como ‘Padre Made in USA’ (2005), ‘El Show de Cleveland’ (2009), ‘Bob´s Burguer’ (2001) y similares, hay que decir que la serie de Parker y Stones se vio relegada de tal forma que muchos pensábamos que había sido cancelada, pero como hemos dicho, debido a su bajo coste y a su uso abusivo de insultos, muertes sangrientas, palabras malsonantes y temas de mal gusto, siguió invicta en antena mientras que productos como ‘Futurama’ luchaba por obtener nuevas temporadas.
Últimamente, y con muchos de los mismos competidores aun en antena, la ficción que hoy traemos a colación también ha visto como entraban en juego otro tipo de productos que, emitiéndose en canales que consideraríamos infantiles, han conseguido cautivar a un público adulto que, sin necesidad de escuchar tacos y demás elementos usados de forma abusiva en South Park, se divierten de igual forma, pudiendo disfrutar de dichos shows incluso en compañía de menores de edad.
Esta fórmula (la de usar shows animados que gustan a niños y adultos por igual) es algo que diferentes estudios de Hollywood (con Pixar a la cabeza) y Japón ya habían explotado hace tiempo, pero que en series como la mencionada ‘Bob Esponja’, o las más recientes ‘Hora de Aventuras’, ‘El Increíble Mundo de Gunball’, ‘Sanjay y Craig’ o ‘Historias Corrientes’ (de las que me considero un fan absoluto) han encontrado un importante nicho de audiencia que arrasa de una forma con la que South Park ni siquiera se atreve a soñar.
Aún así, la serie en la que Kenny muere durante cada episodio, sigue contando con una legión de seguidores que parecen justificar su emisión en televisión, algo a lo que personalmente, la única explicación que le encuentro, es que aún hay gente (adolescentes en su mayoría) a la que el uso repetido de palabras como “puta” o “joder” les sigue haciendo gracia en contraposición con el resto de espectadores que, disfrutando de temas igualmente actuales que los que muestra este show de animación, abrazamos otras formas (a las que los amantes de South Park llamarían políticamente correctas) más interesantes de abarcar la ficción o la realidad sin la necesidad de tener que ver como se falta al respeto a nadie utilizando la sátira como excusa.