Rajoy, con la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez, y el concejal Alberto Fernández, en La Pedrera. :: EFE
ESPAÑA

El debate sobre el modelo de Estado aterriza en la campaña catalana

El líder de la oposición afirma que el proceso autonómico está acabado y ahora toca «unificar» la legislación de las comunidades

BARCELONA. Actualizado: Guardar
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«Creo más en armonizar las leyes del Estado que en hacer normas y más normas para diferenciarnos unos de otros». En Barcelona, en plena tensa espera de lo que el Tribunal Constitucional tenga que decir sobre el Estatuto de Cataluña, Mariano Rajoy se ratificó en su posición contraria a un desarrollo ulterior del Estado de las autonomías y advirtió que, al contrario, habría que dar el proceso de descentralización de la administración por «cerrado».

«Mientras estamos trabajando para que haya leyes iguales en toda Europa, por ejemplo, respecto al IVA, aquí se hacen 17 leyes distintas o más sobre la misma cuestión», reprochó en una entrevista en la radio pública catalana. El líder de la oposición -que viajó a Cataluña para clausurar la escuela de invierno que su partido ha organizado en esta comunidad, inmersa ya en ambiente preelectoral- defendió que ha llegado el momento de «simplificar y unificar» las normas para evitar disfunciones.

En realidad, fue poco concreto sobre el tipo de leyes que, a su juicio, sería necesario «armonizar», pero sí ofreció casuística. Citó así el caso reciente del ex ministro de Justicia Mariano Fernández Bermejo multado por cazar en una finca perteneciente a dos comunidades autónomas distintas cuando sólo tenía permiso de caza en una de ellas. «No puede haber requisitos distintos en materia de transportes o de medio ambiente -añadió- no puede ser que para abrir a un hotel le pidan a uno unas cosas y en la comunidad de al lado otra».

Diálogo

El líder de la oposición subrayó que la mayor parte del gasto público está en mano de las autonomías de modo que, de cada 100 euros que gastan las administraciones, 20 ó 21 corresponden al Gobierno central, 13 ó 14 a los ayuntamientos y 36 ó 37 a las autonomías (el resto se destina a pensiones de la Seguridad Social). Es así, recordó, porque las comunidades son quienes deben garantizar los servicios públicos fundamentales, esto es, sanidad, educación y servicios sociales. «En lo sustancial, el Estado de las autonomías ya está hecho y ahora lo que debe preocuparnos es el exceso de leyes, decretos y reales decretos leyes que existen en todas partes y dificultan la labor de los ciudadanos», insistió.

Propuso pues abrir un diálogo sobre esta cuestión porque, a su parecer, quien sale perjudicado por la falta de armonización legal es el ciudadano. «No intentemos hacer normas y más normas para diferenciarnos -reclamó-; ahí no está la diferencia, la diferencia está en la eficacia de la gestión».

En territorio hostil, Rajoy defendió haber hecho lo que debía cuando recurrió el 'Estatut' ante el Tribunal Constitucional. Pero renunció a abrir un rosario de críticas sobre su contenido y se limitó a garantizar que, llegado el momento, acatará la sentencia del intérprete de la Carta Magna .