Antich pierde a un diputado clave para el Gobierno balear

El parlamentario del Grupo Mixto Bartomeu Vicens ha anunciado que abandonará su escaño en el Parlament por recomendación de su abogado. Vicens no ha podido notificar en la Cámara insular su dimisión porque el registro cierra a las 14.00 horas. No obstante, Vicens ha señalado en una misiva que por recomendación de su abogado dimite de su cargo como diputado en el Parlament.

Esta renuncia al escaño se produce un día después de que la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia e las Islas Baleares (TSJIB) le condenara a cuatro años y seis meses de prisión e inhabilitación absoluta durante ocho años por malversación de caudales públicos y prevaricación administrativa. Vicens ocupaba actualmente, como independiente, un escaño del grupo mixto tras haber sido suspendido de militancia en Unió Mallorquina (UM) por su presunta implicación en varios casos de corrupción.

La sentencia del TSJIB hacía referencia al caso del supuesto pago desde el Consell de Mallorca de 12.020 euros de un informe plagiado de Internet sobre el valor del suelo en la isla y que presumiblemente se utilizó después para un supuesto pelotazo urbanístico en el polígono industrial palmesano de Son Oms.

Gobierno en minoría

Antes de su renuncia, el presidente del Gobierno balear, Francesc Antich, había anunciado que gobernará en minoría en el Parlament porque iba a prescindir del voto de Vicens. De esta forma, el presidente anunciaba que no rompe sus relaciones con el Bloc y UM, sino que en la Cámara autonómica no contarán nunca más con el voto del hasta ahora parlamentario del grupo mixto. Su intención, en caso de no haber renunciado al escaño, era que cuando votara no lo haría uno de los diputados socialistas. De esta forma, el Ejecutivo balear quedaba en minoría en la Cámara al empatar en 29 votos con el PP y AIPF. "Gobernaremos al igual que si no estuviese Vicens", destacaba.

Antich hacía este anuncio después de que esta semana lograra aprobar los presupuestos autonómicos para 2010 con el voto del Vicens, un hecho que consideró necesario puesto que la ciudadanía necesita unas nuevas cuentas que permitan al Gobierno insular hacer inversiones, realizar gasto social y afrontar la crisis. Ya entonces explicaba que si Vicens abandonara el escaño, como finalmente va a hacer tras reclamárselo todas las fuerzas políticas, ocuparía su lugar otra persona de UM no imputada en ningún caso de corrupción y que respondería a la voluntad de "tirar adelante este Govern".