Joaquín Morales pretende cerrar la venta del Xerez antes de las 16.00 horas
El nazareno quiere sellar el acuerdo con el financiaro argentino antes de emprender el viaje que tiene previsto con rumbo a Argelia
JEREZ. Actualizado: GuardarLa negociación para la venta del Xerez Club Deportivo tampoco se cerró por completo en la jornada de ayer. Al menos, así lo confirmó el propio Joaquín Morales, que pospuso nuevamente su decisión final. El nazareno escribió ayer un nuevo capítulo de su historia interminable sin dar los pasos definitivos para cerrar la venta de una parte mayoritaria de su paquete de acciones, pues le restaba una última llamada para ponerle el punto y final al pacto. Este paso definitivo tenía previsto realizarlo a primera hora de la mañana de hoy, pues a las cuatro de la tarde saldrá rumbo a Argelia y su intención era dejarlo todo solucionado. «Estoy convencido que esta persona que tiene una financiera, mucha ilusión y bastante dinero es la mejor de las opciones para el Xerez», afirmaba el propio empresario nazareno. Antes de antender la llamada de LA VOZ ya les había comunicado a los miembros de la plataforma 'Salvemos al Xerez' que sólo falta una llamada a Argentina para dar el ok final y cerrar un acuerdo que está más que encarrilado. Morales perderá el 52% de su paquete accionarial, sin contar el porcentaje pignorado por Luis Oliver, así como el que se iba a otorgar a Rafael Mateos por la deuda contraída.
La muestra más evidente de que la rúbrica del acuerdo está más que cercano, es que este financiero (finalmente es una única persona y con nacionalidad argentina) que comprará el conjunto jerezano mandó en la jornada de ayer una avanzadilla a las oficinas del Xerez en el edificio Jerez 2002 para conocer de primera mano la situación de la entidad azulina. Estos dos emisarios del grupo argentino estuvieron en la mañana de ayer desde las 10 horas hasta la una y media de la tarde aproximadamente en las oficinas de la entidad azulina para estudiar, con las cuentas por delante, la viabilidad deportiva de su nuevo proyecto. Los argentinos no se reunieron precisamente con Antonio Fernández Monterrubio, director general del club y al que conocieron ayer, sino con los miembros del cuerpo técnico xerecista, para así estudiar el presupuesto factible para realizar refuerzos de cara al inminente mercado invernal, así como conocer las instalaciones de la entidad.
Movimientos en lo deportivo
Es por ello que la secretaría técnica del Deportivo volverá a ponerse las pilas de cara a fichar nuevos jugadores para el mes de enero. Eso sí, no se dará ningún paso hasta que no sea el propio Morales el que notifique la llegada de nuevos dueños a la entidad azulina. De esta manera, los seguimientos que el club había realizado a diversos jugadores para ampliar la actual plantilla han quedado parados, habiéndose incluso estropeado alguna operación que ya iba por buen curso y que podría no tener remedio.
Lo que está claro es que el cambio de cara en la titularidad de las acciones no va a suponer ninguna gran variación en el organigrama planificado para la presente temporada. Ni cuerpo técnico ni directivo van a cesar en sus cargos, con la excepción de un Ziganda cuya continuidad sigue pendiente de un hilo.
'Salvemos al Xerez' rechaza la propuesta
Joaquín Morales recibió ayer en su Dos Hermanas natal a los representantes de la plataforma 'Salvemos al Xerez', conformada por la Federación de Peñas Xerecista (FPX) y la Agrupación de Peñas y Abonados Xerecistas (APAX). El objetivo del encuentro no era otro que el de negociar la venta de la entidad a los aficionados azulinos, pero la plataforma se encontró a un Morales prácticamente decidido a vender a este empresario argentino (el único dato novedoso que les comunicó fue su nombre de pila: Federico).
Los miembros de la plataforma (Manuel Cazalla, Juan Carlos Corchado, Manuel Rego y Fernando Guerrero) realizaron un planteamiento para que la afición se hiciera con un paquete mayoritario de las acciones de la entidad, pero Morales sólo contemplaba la venta de un porcentaje minoritario. Algo que no estaban dispuestos a aceptar bajo ningún concepto los aficionados xerecistas.